La idea es darle la vuelta a nuestros objetos del día a día, los que todo el mundo tiene en casa. Llegar a ver de otro modo una escoba, ese es el objetivo...
El día a día hace que los objetos se vuelvan invisibles, pero no tiene porque ser así, porque además una visión creativa de lo que nos rodea puede ayudarnos en momentos difíciles, o si necesitamos arreglar algo al estilo McGiver (risas).
No hemos leído nada de él, la verdad (risas), pero nos gustaría tener más tiempo para hacerlo. Siempre hemos querido leer algo pero nunca supimos por donde empezar. En cambio, sus teorías sí que han influido el arte contemporáneo, seguramente a través de Duchamp, y nos llegan a través de segunda, tercera y cuarta mano. Como comentábamos antes, nos interesa la idea de Brecht de romper la cuarta pared teatral, y el efecto de distanciamiento de Brecht, que aplicada al arte podría interpretarse como un extrañamiento en el público. Preguntarse: ¿pero qué es esto? Y que ese extrañamiento lleve a una reflexión. Tal vez, primero solo sobre un color, sobre una forma, pero que también puede llegar a otro tipo de reflexiones más importantes, sobre el universo por ejemplo.
Son directamente el motor con el que trabajamos y el ojo con el que miramos los objetos. Sin humor es imposible entender la mitad de las cosas que pasan, aunque puedan ser tipos de humor que no entendemos, pero están ahí.
Hemos utilizado algunas referencias pop y estamos cómodos haciéndolo, aunque no es nuestro campo de trabajo normal. Nos atrae mucho y podríamos considerarnos un poco pop. Minimalistas pop.
El arte debería poder hablar todos los idiomas, comunicar sin necesidad de hablar o leer un texto. Pero no es fácil, a nosotros se nos olvida todo el tiempo tenerlo en cuenta. Pero está claro que, entre hacer un trabajo en un país u otro hay una gran diferencia, el contexto puede ser radicalmente distinto y las cosas entenderse al revés.
Es difícil, muy difícil y no lo recomendamos a nadie (risas). Nosotros llevamos muchos años trabajando juntos y es una manera de trabajar que nos gusta, pero hay un diálogo continuo y también conflictos. En nuestro caso, además, nos llevamos el trabajo a casa porque somos también pareja, o sea que el lío es tremendo.
Muchas de las referencias no vienen del arte, son más de nuestro día a día, de como nos manejamos con los objetos cotidianos. El por qué de tus decisiones más ínfimas es lo que nos motiva: la manera de colocar las cosas en la nevera, o la ropa que te pones un día determinado. Poder hablar de eso y que nos entendieran sería un sueño (risas).
El diálogo. Es el principio, el medio y también el fin de los proyectos.



