Coincidiendo con el segundo aniversario de la irrupción de la pandemia en nuestras vidas, 080 Barcelona Fashion vuelve a apostar por el formato digital consolidando este prometedor modelo en su 4ª edición en streaming. Y nosotros desde METAL, en colaboración con la pasarela y el hotel ME Barcelona, hemos querido sumar fuerzas para expandir su mensaje. ¿Cómo? Retomando nuestra serie de podcasts, la cual iniciamos el pasado mes de octubre y en la que ahora seguimos charlando distendidamente con algunos de los diseñadores protagonistas de la edición. Hoy charlamos con Kati Lange, la diseñadora al frente de KM by Lange, un estudio creativo con sede entre Barcelona y Kiev, sobre cómo la moda refleja (y moldea) la sociedad en la que vivimos.
Ya lo adelantábamos en el preview de 080 Barcelona Fashion que compartimos hace unos días, donde nos hacíamos eco de las propuestas más prometedoras de la edición y recogíamos algunas de las rotundas declaraciones que los creadores emitían en las conversaciones promovidas por la organización. La diseñadora ucraniana Kati Lange, alma mater de KM by Lange, acababa entonces de aterrizar en Barcelona después de haber presenciado la masacre de la que, aún a día de hoy, es víctima su país. Una trágica e injusta situación a la que responde a través de la moda, y que nos lleva en primer lugar a recuperar este artículo en el que, además de condenar la invasión rusa, recopilamos una lista de organizaciones a través de las cuales podemos ayudar a Ucrania.
Porque si hay algo que no es ajeno a la moda, eso es la situación política, económica y social que le ha tocado vivir. O al menos no debería serlo, convirtiéndose así en un mecanismo de denuncia, difusión, aprendizaje o condena de determinados actos y fenómenos. El estudio creativo con sede entre Barcelona y Kiev nos presenta ahora su nueva colección, Zemlia. Una palabra que, si bien en ucraniano significa ‘tierra’, nos remite a nuestros orígenes, a nuestra infancia o a las emociones más internas. Significado frente a significante en una propuesta que, como ya hemos visto en las colecciones presentadas por otros diseñadores en esta edición de 080 Barcelona Fashion, pretende desdibujar las fronteras del género. En este caso, a través de looks monocromáticos en los que se imponen el blanco, el negro y los tonos crudos.
La presentación comienza con un poema a cargo de Serhiy Zhadan, antes de dejar paso a una violinista que, en directo, acompaña a las modelos sobre la pasarela. Pero más allá de la música y la moda, que se fusionan perfectamente creando una atmósfera tan íntima como solemne, la cerámica también está presente. Todo ello en un clima que prioriza la calidad frente a la cantidad, los pasos firmes frente al ritmo acelerado y el diseño frente a las tendencias.
Porque si hay algo que no es ajeno a la moda, eso es la situación política, económica y social que le ha tocado vivir. O al menos no debería serlo, convirtiéndose así en un mecanismo de denuncia, difusión, aprendizaje o condena de determinados actos y fenómenos. El estudio creativo con sede entre Barcelona y Kiev nos presenta ahora su nueva colección, Zemlia. Una palabra que, si bien en ucraniano significa ‘tierra’, nos remite a nuestros orígenes, a nuestra infancia o a las emociones más internas. Significado frente a significante en una propuesta que, como ya hemos visto en las colecciones presentadas por otros diseñadores en esta edición de 080 Barcelona Fashion, pretende desdibujar las fronteras del género. En este caso, a través de looks monocromáticos en los que se imponen el blanco, el negro y los tonos crudos.
La presentación comienza con un poema a cargo de Serhiy Zhadan, antes de dejar paso a una violinista que, en directo, acompaña a las modelos sobre la pasarela. Pero más allá de la música y la moda, que se fusionan perfectamente creando una atmósfera tan íntima como solemne, la cerámica también está presente. Todo ello en un clima que prioriza la calidad frente a la cantidad, los pasos firmes frente al ritmo acelerado y el diseño frente a las tendencias.