Veinteañeras descaradas con los sentimientos revolucionados y mucho mamarracheo. Miguel Ángel Blanca, Berta Prieto y Belén Barenys abren las puertas a su juventud, a los altibajos con los que se han encontrado y a lo que significa vivir en Barcelona cuando ni siquiera sabes cómo vas a pagar el alquiler a final de mes. Todo ello con Autodefensa. Disponible a partir de mañana 29 de noviembre en Filmin, te animamos a ver los primeros cinco capítulos.
“Es la típica serie sobre jóvenes que nunca se ha hecho”, así la describe Berta Prieto cuando le preguntas sobre Autodefensa. Belén y Berta se ponen delante de la cámara para relatar, con un tono muy cercano, lo que es tratar de descubrir quién eres mientras la vida no te da tregua y avanza sin parar, estés listo o no. Hay fiestas, droga y alcohol, pero también un relato que gira alrededor de lo difícil que a veces resulta ser lo suficientemente mayor como para vivir con tus padres, y a la vez demasiado joven como para afrontar los problemas del mundo sin cuestionártelo todo. Pese a que la serie no busca apelar a ningún público en particular, “el guion ha estado escrito por gente de veintidós, veintitrés años, eso también es lo que la hace joven” explica Belén, lo que, inevitablemente, hace que se acerque más a una generación que a otra.
Autodefensa presenta una nueva manera de disfrutar de una serie. Es ficción, pero destacan pinceladas de realidad. Son dos amigas que viven en Barcelona, a veces salen de fiesta y se arrepienten; otras la fiesta es lo único que puede ayudarlas a no perder la cabeza. Las dos buscan su hueco, no solo en la ciudad, sino que también en la vida en general. Tienen miedo, también mucha jeta, pero todo ello no es más que su manera de defenderse de lo que en realidad supone ser joven y tener que ir a por todas para encontrar tu sitio. Berta Prieto tiene una idea muy clara al respecto y según ella “la gente se pasa la vida teniendo cuidado, sí al final tienes tanto cuidado acabas por no hacer nada”.
Los capítulos no superan los veinte minutos y todos ellos tienen un inicio y un final. Pequeñas historias autoconclusivas que exponen algunos de los problemas con los que se han encontrado a lo largo de su juventud: “Hemos sido honestas con lo que somos nosotras y hemos contado nuestras cosas particulares”, explica Berta sobre los relatos que hay tras los episodios. Además, algo a tener en cuenta es que la grabación cambia dependiendo del capítulo, y es que cada historia necesita su propia manera de producirse para ser contada.
