OOoO

Si no faltáis a vuestra cita con la agenda semanal de ACERO, ya habréis visto que hace unos días os hablábamos de IED Ágora, la experiencia liderada por el IED Madrid en el marco de la Fiesta Design del Madrid Design Festival 2024. La iniciativa tuvo una estupenda recepción y, aunque ya cerró sus puertas, nos adelantaba todo lo que la suma de fuerzas entre la escuela y el festival que convierte a Madrid durante casi dos meses en capital internacional del diseño estaba a punto de ofrecernos.

Fieles a su misión de poner en valor las ideas y necesidades de la generación Z, y favoreciendo las sinergias con los docentes -todos ellos profesionales establecidos y valorados en su ámbito-, el IED Madrid todavía tenía mucho que desvelar. ¡Y es que no se cumplen 30 años todos los días! ¿Su propuesta? La exposición OOoO. Una muestra en la que nos sumergimos a través de una visita guiada conducida por sus artífices el pasado 24 de febrero en el IED Madrid FabLab, que parte del concepto de Ontología Orientada a Objetos para reimaginar los objetos como organismos.

A través de la participación de distintos docentes del IED Madrid, procedentes de diversos grados y másteres, la exposición nos invitó a desafiar las fronteras convencionales entre objetos inanimados y la vida orgánica. Una disolución de barreras en línea con la visión que el IED Madrid lleva tres décadas defendiendo, unificando diseño con diálogo y haciendo que las conversaciones cristalicen en distintos formatos, un elemento esencial para el avance y la adaptación a los nuevos tiempos. Y es que para el IED Madrid quedarse atrás nunca fue una opción.

OOoO nos ofreció, de la mano de profesores como Carlota Gallo, Andrés Izquierdo o Ariadna Chez, una experiencia en la que lo inerte abraza lo vivo y el foco se pone no solo en la función utilitaria de los objetos, sino en su fascinante narrativa evolutiva. Una narrativa que, como bien apunta Gallo, docente en el Grado de Diseño de Producto del IED Madrid y participante en la muestra, le ha permitido reconectar con sus obras desde nuevas perspectivas. “Hacía tiempo que no participaba en ninguna exposición, necesitaba barbecho y me hace ilusión participar con esta pieza”.

Su pieza, Killing Objects, nos habla del fin del objeto, representado en directo ante el espectador. “Creo que la pieza hoy es distinta a la pieza que era antes, lo que entiendo por objeto se ha desdibujado; ahora son pequeños elementos abstractos que solo tienen significado cuando se lo aporto. Es una pieza que habla de finales, y exponerla en un espacio de nuevo para mí también habla del final de un momento de mi vida en la que me interesaba hablar del fin”, comenta su autora, quien reconoce sentir que ha llegado el momento de trabajar en otras direcciones.

Para Carlota, quien no entiende el diseño sin público y comenzó a dar clases en el centro hace un año, que el IED Madrid sea la escuela oficial de Madrid Design Festival 2024 tiene un significado especial. Y es que su andadura en la escuela empezó cuando recibió una beca para estudiar un MDI en Producto, una oportunidad que acabaría cambiando su visión para siempre. “La forma de trabajo de ese máster me ayudó a entender mejor el mundo en el que vivía y enfrentarme a retos contemporáneos de la mano de profesores que me cuidaron mucho y de los que aprendí nuevos enfoques y metodologías”.

Por su parte, Andrés Izquierdo, profesor en el mismo grado que Carlota y también protagonista de la exposición OOoO, destaca la alegría que siente al participar con sus compañeras docentes en una muestra conjunta. “Organizar una exposición de docentes me parece una iniciativa bonita y una oportunidad para poner trabajo en común y es lo que más me apetecía de participar”. La obra que presenta Izquierdo, Blood Moon (Stool/Side table), consiste en tres elipsoides de arena que se encuentran para conformar una estructura más o menos estable que hace las veces de taburete o mesa auxiliar.

Estamos ante un objeto que, tal y como nos cuenta, construye por primera vez en 2019, y del cual han ido surgiendo distintas iteraciones en los que el número de elipsoides, los materiales o la función que sugieren varían. “Tiene que ver con la representación de las fases lunares, la ficción del objeto desenterrado, y los relojes de sol. El círculo es la forma que menos me gusta y más utilizo en mi trabajo”. Pero si hay algo que enfatiza Izquierdo en la conversación que mantenemos, es la colaboración como herramienta de transformación. “Aprender a trabajar en colectivo, navegar y poder disfrutar de las relaciones afectivas que se producen en el camino, tener conversaciones y procesos de trabajo con objetivos comunes en lugar de individuales y abrir la participación es un aprendizaje que creo necesario”.

No es casualidad que este proceso de aprendizaje, en el que se fomenta la escucha activa y aprendizaje bilateral, del estudiante al docente y del docente al estudiante, sea uno de los principales reclamos del IED Madrid. Una forma de entender la educación y el mundo en su conjunto a la que nos permiten adentrarnos gracias a proyectos como OOoO, exposición en la que también han participado Concha Romeu, Joel Blanco, Inés Llasesa e Inés Quezada (Kauani), Raquel Buj, Lola Zoido o Ariadna Chez, esta última profesora en el Grado de Diseño de Moda y en el Diploma en Comunicación, Estilismo e Imagen Moda. A ella le preguntamos qué es lo que más disfruta de ser docente en el IED Madrid. Responde decidida. “Tener la oportunidad de lanzar ideas a muchas personas y ver cómo reaccionan, ver si les da igual o por el contrario les vuela la cabeza. También me gusta que me ayuda a salir del taller, si no estaría mucho más encerrada en mi cueva. Se podría decir que me conecta con el mundo exterior”.

Poniendo en valor la creación de lazos y de un ecosistema creativo rico, Chez ve en OOoO una invitación directa a la sinergia y el apoyo entre compañeros. “De esta manera nos conocemos y admiramos. Creo que son cosas esenciales a la hora de mantener el entusiasmo en nuestra práctica artística”. La obra con la que participa en la exposición consiste en un altar cotidiano, el cual está vivo y cuyas partes interactúan entre sí, mutando con el tiempo y el uso que les damos. “No son en realidad “piezas”, sino seres inútiles rebosantes de emociones que les brotan y no pueden controlar, igual que nosotres”, comenta antes de invitar a leer el Manifiesto de lo menor a todos aquellos que quieran profundizar en la materia.

Antes de despedirnos y continuar nuestro recorrido por la muestra, le pedimos a Ariadna que lance un mensaje a sus alumnas; solo uno. Su reflexión final es clave, y encapsula perfectamente otro de los pilares sobre los que se sustenta la filosofía del IED Madrid. “Que no esperen a terminar de estudiar para sacar adelante sus proyectos, solo se aprende cometiendo errores,” dice decidida. Ni más ni menos. Curioso que OOoO hable precisamente de la vida escondida tras los objetos inanimados, de la interacción y su vínculo con lo estático. ¿Acaso nos está animando el IED Madrid a pasar a la acción? Parece ser que sí.