Durante la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, siempre hay un desfile que acapara todas las miradas, goza de un front row de lo más concurrido y sus creaciones terminan por invadir hasta el último rincón de las redes sociales. Antaño eran los del legendario David Delfín, después los del ya internacional Palomo Spain, y ahora le toca el turno a Dominnico. Esta firma capitaneada por el alicantino Domingo Rodríguez ha irrumpido con fuerza y paso firme en el mundo de la moda desde su creación en 2016.
Rodriguez, a través de sus visiones futuristas, siluetas atrevidas y una personalidad tan potente como propia, ha conseguido que Dominnico no solo se haga un hueco en la pasarela de Madrid sino también en Hollywood, gracias al apoyo de estrellas como Rosalía o Lady Gaga. Porque Dominnico ha llegado para quedarse y llevar a este fatigado planeta a una nueva galaxia de estilo y diversión.
Empecemos por el final. Este mes has presentado en MBFW Madrid la colección Uhura, que goza de aires muy futuristas y parece inspirarse en grandes cintas de ciencia ficción como El quinto elemento o Blade Runner. Incluso su nombre, Uhura, recuerda al de la sensual y mítica teniente de Star Trek. Cuéntanos, ¿supone toda esta inspiración futurista una especie de ejercicio escapista provocado por el presente actual? ¿Qué relación te une con la ciencia ficción? ¿Eres fan o ha surgido a raíz de Dominnico?
El futuro es el punto de partida de todas mis colecciones, pero es verdad que en este momento más que nunca quise escapar hacia un mundo perfecto en el que no existieran prejuicios por una condición sexual, una etnia o una religión determinadas. Como dijo Franca Sozzani en una ocasión, no puedes ser avaro con tus sueños, han de ser lujosos. ¿Por qué debería escatimarle los sueños a la gente?
De este modo, he querido transportar al público a un universo lleno de esperanza y belleza utilizando una proyección en 3D creada por Ecce Visuals, y aportar a la colección toques de lujo con los sombreros en colaboración con la diseñadora colombiana Lina Osorio o la colección de bolsos creada junto a la firma alicantina Suritt.
De este modo, he querido transportar al público a un universo lleno de esperanza y belleza utilizando una proyección en 3D creada por Ecce Visuals, y aportar a la colección toques de lujo con los sombreros en colaboración con la diseñadora colombiana Lina Osorio o la colección de bolsos creada junto a la firma alicantina Suritt.
Esta edición de MBFW Madrid ha estado marcada por las estrictas medidas de seguridad. Tú te estrenaste en esta pasarela en 2019 con la colección Idolatría. ¿Cómo ha evolucionado esta experiencia de un año a otro? ¿Cómo has vivido esta vez el reto de presentar tu nueva colección, y de qué manera te has enfrentado a unas circunstancias tan adversas como las generadas por la pandemia?
Para ser más exactos, esta es la cuarta ocasión en la que presento colección dentro de MBFW Madrid, y la segunda como diseñador dentro de la pasarela de los consolidados. Hemos trabajado conforme a las medidas de seguridad del plan puesto en marcha por IFEMA y no ha habido ningún problema por ello. De hecho, ha sido un privilegio poder haber estado ahí y ver cómo todas las personas que han trabajado para que este evento sea posible lo hayan dado todo para conseguirlo.
La Milan Fashion Week del pasado febrero, justo antes del gran confinamiento, encendió un debate sobre el acelerado ritmo de la industria, donde las semanas de la moda se suceden sin descanso. Algunos miembros de la industria han puesto sobre la mesa la necesidad de reestructurarla sin contar con el desfile presencial. Es más, el pasado junio, en París, se celebró la semana de la moda masculina de forma virtual, al igual que más recientemente lo ha hecho la 080 de Barcelona. ¿Crees en la moda sin los desfiles y las fashion weeks?
Creo que debe existir un término medio y cada marca debe encontrar el modo de presentar sus propuestas. En mi caso concreto, creo que un desfile completa la experiencia y, además, en las próximas semanas daremos a conocer nuestro primer desfile digital, grabado previamente a la fashion week para poder mostrar ambos caminos.
Volvamos al principio por eso. Fue en Budapest donde hiciste tu presentación pública, con una colección titulada Unusual Dichotomy, allá por 2016. Desde entonces, ¿qué ha cambiado en Dominnico y en Domingo Rodríguez?
La esencia es la misma, sin embargo, ahora la marca está más consolidada y tiene acceso a plataformas y personas más influyentes que en sus inicios.
En 2019 se te nombró el mejor diseñador emergente en la edición número 14 del Mercedes-Benz Fashion Talent. ¿Prestas atención a los reconocimientos? ¿Cómo te cambió/afectó como diseñador y como marca?
Los reconocimientos son muy importantes para mí y, sobre todo, una satisfacción que puedo compartir con todo mi equipo. El Fashion Talent me dio la oportunidad de mostrar mi colección en Georgia y la fuerza para presentar mi proyecto en la plataforma de MBFW Madrid, con Idolatría.
Eres joven y el mundo de la moda se caracteriza por prácticas sin remunerar, exclusividad, fatiga y mucho, mucho esfuerzo. ¿Cómo fueron tus comienzos en la industria? ¿Siempre has querido ser el capitán de tu propia firma?
Desde que finalicé mis estudios quise crear mi marca, y como bien dices, ha sido un camino duro y lleno de esfuerzo, y a día de hoy lo sigue siendo. Sin embargo, me merece la pena ya que crear mi propia marca me ha dado la oportunidad de conocer a muchas personas que hoy en día son parte de mi equipo o ya forman parte de mi vida.
¿Qué les dirías a todos aquellos que desean seguir tus pasos y lanzarse a crear su propia marca?
Que confiaran en ellos mismos y tuvieran claro hacia dónde quieren ir y a dónde quieren llegar. Los obstáculos se pueden saltar si hay perseverancia a la hora de conseguir tus sueños.
La colección Idolatría tenía un toque castizo, incluso flamenco; Neil parecía gozar de un fuente más vintage, mientras que Harajuku Kids bebía mucho más de la estética kawaii… ¿Cómo funciona tu proceso creativo?
Todas mis colecciones parten de un mismo ideal de mujer que viaja en un espacio, tiempo y estética comunes caracterizados por aires futuristas, el espectáculo y el nuevo lujo.
En 2019 colaboraste con Rosalía, creando una colección en exclusiva para su gira El Mal Querer, ¿qué ha supuesto para ti y para Dominnico contar con el apoyo de una estrella de su talla?
Contar con Rosalía como clienta e icono musical del momento ha supuesto, sin duda, un reto y una exposición que han permitido a la marca crecer a su lado.
Además de Rosalía, hemos visto a otras artistas como Lizzo o Lady Gaga llevando tu ropa, ¿cómo te sientes cuando ves que tu prenda es apreciada y lucida por artistas de este nivel? ¿A quién te encantaría ver llevando una de tus creaciones?
Vestir a estas divas significa tener las mejores embajadoras posibles que podría tener para la marca. Los valores que defiende Lizzo, de la mujer con un cuerpo real, y los de Lady Gaga, una mujer comprometida con las sociedad en muchos sentidos, son los que también definen a Dominnico. Me encantaría que Beyonce llevara alguno de mis diseños.
Tus prendas gozan de una facilidad para volverse virales realmente envidiable. ¿Crees que las redes sociales son fundamentales para el crecimiento de una firma de moda?
Las redes sociales han sido y son parte de la clave del éxito de la marca, y hacer buen uso de ellas está en nuestra mano.
Dominnico es brillo, son plumas, materiales psicodélicos… ropa para subirse a un escenario o triunfar en una alfombra roja. Como has dicho en una respuesta, espectáculo. Pero, ¿te verías capaz alguna vez de convivir con el minimalismo, o son los excesos el alma de esta firma?
Uno de mis mayores retos es depurar líneas dentro de la estética que propongo, y Uhura es un claro ejemplo de que va hacia este nuevo rumbo.
Durante los últimos años, la moda genderless ha cobrado gran protagonismo en la industria. Dominnico se dedica al prêt-à-porter femenino ¿crees que en un futuro tus prendas se destinarán al público sin tener en cuenta en cuenta ningún el género?
Las prendas de Dominnico están pensadas para mujer pero esto no significa que deban ser asociadas únicamente a un género.
