Me gusta mucho la idea de conectar a gente diferente que pueda aportar su punto de vista e ideas a un mismo proyecto. Desde un florista a una diseñadora textil, creo que el proyecto se hace grande y adquiere nuevas perspectivas y matices. Se enriquece.
María Ramírez, diseñadora textil, colabora con Querido en una edición especial de cinco cajas-libro pintadas a mano. María ha sabido interpretar rápidamente el proyecto y mediante sus trazos libres ha decorado la tela que recubre las cajas, una carta tachada que esconde en su interior un mensaje que habla de amor y flores.
Felipe de Orquídea Drácula ha aportado su arte para la sesión de fotos y también nos ha dejado su bonito espacio, donde se presentará el libro. Sus plantas se salen de cualquier común. Me encanta su floristería porque la concibe como un laboratorio floral, y esto tiene mucho que ver con Querido. Él pinta las flores cortadas para alargar su belleza, es genial.
Alex Cascallana ha colaborado haciendo las fotografías. Le conozco desde hace un tiempo, siempre quise tener la oportunidad de ser retratada por él. Es un fotógrafo al que admiro mucho, su manera de trabajar es analógica y esto tiene mucho que ver conmigo.
María Rosenfeldt, de Herida de Gato, ha sido la estilista. He tenido el privilegio de poder vestirme con su nueva colección –que presentó el pasado 16 de noviembre. Las prendas que María confecciona representan a una mujer actual, a la mujer 2018.
Rocío Madrid, diseñadora, y Sara Arroyo, editora que co-dirige conmigo Paisana Books, me han ayudado con la edición y el diseño de la maqueta. Han sido piezas fundamentales de este proyecto.
“Los archivos digitales no se poseen, si lo pierdes siempre lo puedes volver a descargar, no se crea un vínculo con ello. Es bonito tener algo que es bello y que se puede guardar como si fuera una joya.”