Estos días se está celebrando la decimotercera edición de Swab, la feria de arte contemporáneo de Barcelona, que tiene lugar hasta el 15 de octubre, y que este año se plantea en un formato totalmente digital. Debido a la perdurable crisis sanitaria y a la intención de garantizar un evento 100% seguro, Swab se puede visitar este año en 3D, casi a modo de videojuego, a través de una app para ordenador gratuita que se te puedes descargar en la página web de la feria. ¿Sientes curiosidad por ver el resultado? Pues adéntrate en las más de 75 galerías de todo el mundo y los cerca de 200 artistas participantes cuya obra puede ser tuya.
Esta es una edición marcada por la innovación tecnológica, la sostenibilidad y la igualdad –el 50% de los artistas participantes son mujeres–, que se servirá de una variedad de herramientas interactivas que sus usuarios podrán disfrutar de manera online. Desde la posibilidad de comprar obras con microcréditos mediante la aplicación de Fintonic hasta pedir una de las emblemáticas tortillas de Flash Flash y que te llegue a casa como si estuvieras en el recinto (parte de la iniciativa Swab Picnic para enriquecer el tejido de la ciudad), o descubrir lo nuevo en música de la mano del festival Mira, Swab llega lleno de novedades y se establece como referente en el mundo de las ferias de arte.
Nos encontramos frente a “un proyecto complejo e innovador”, aseguraba su director, Joaquín Diez-Cascón, en la rueda de prensa. Una feria que apuesta por las nuevas tecnologías y donde la digitalización converge con el mundo artístico. Y es que esta edición explora formatos y vías que responden a la nueva realidad que nos ha tocado vivir.
Desde que se inicia la aplicación, entramos en un mundo virtual donde podemos recorrer el Pavelló Italià recreado de manera digital como si se tratara de un videojuego, y movernos por allí para encontrar información detallada sobre cada obra, contactar con la galería o el artista, conocer precios… El software de la app ha sido creado por el equipo de arquitectos y programadores de la misma feria, quienes se han esforzado en transmitir la máxima calidad sensorial del evento. Además, Swab busca facilitar el coleccionismo al mismo tiempo que garantiza la protección de galeristas y visitantes –sin romper la relación humana entre ellos, por supuesto–, ofreciendo obras cuyos precios oscilan entre los 10€ y los 24.000€.
Este año, la feria estrena un par de programas que rescatan y exploran el potencial del continente asiático. El primero, Focus Korea, que acoge cuatro galerías cuyos artistas representados combinan el imaginario tradicional coreano con formatos contemporáneos. “Corea es muy importante en el ámbito del arte, están en un punto de efervescencia en arte, moda, música, cine…”, mencionó la directora de arte de la feria, Carolina Diez-Cascón. Por otro lado, el talento asiático también se enfatiza en Video Box, la sección de videoarte en la que se exponen piezas de artistas de las seis galerías más representativas de esta región, incluyendo Vietnam, Singapur, Filipinas e Indonesia.
Las temáticas que más tratan los artistas de esta edición están relacionadas con los efectos de la pandemia o con la relación que existe entre naturaleza y tecnología, enfoques que no podían faltar en los tiempos que corren. Entre las obras que retratan la relación humanidad-tecnología encontramos Blog affair, de María Alcaide, un video que plasma el auge de internet como medio de trabajo influencer a modo de parodia, o Social Distancing Series, de Pep Vidal. Para explorar lo que nos trae edición en otros formatos, la feria virtual también tiene un tour paralelo en Artsy, así que no quedan excusas. Todo esto y más, al alcance de un click.
Nos encontramos frente a “un proyecto complejo e innovador”, aseguraba su director, Joaquín Diez-Cascón, en la rueda de prensa. Una feria que apuesta por las nuevas tecnologías y donde la digitalización converge con el mundo artístico. Y es que esta edición explora formatos y vías que responden a la nueva realidad que nos ha tocado vivir.
Desde que se inicia la aplicación, entramos en un mundo virtual donde podemos recorrer el Pavelló Italià recreado de manera digital como si se tratara de un videojuego, y movernos por allí para encontrar información detallada sobre cada obra, contactar con la galería o el artista, conocer precios… El software de la app ha sido creado por el equipo de arquitectos y programadores de la misma feria, quienes se han esforzado en transmitir la máxima calidad sensorial del evento. Además, Swab busca facilitar el coleccionismo al mismo tiempo que garantiza la protección de galeristas y visitantes –sin romper la relación humana entre ellos, por supuesto–, ofreciendo obras cuyos precios oscilan entre los 10€ y los 24.000€.
Este año, la feria estrena un par de programas que rescatan y exploran el potencial del continente asiático. El primero, Focus Korea, que acoge cuatro galerías cuyos artistas representados combinan el imaginario tradicional coreano con formatos contemporáneos. “Corea es muy importante en el ámbito del arte, están en un punto de efervescencia en arte, moda, música, cine…”, mencionó la directora de arte de la feria, Carolina Diez-Cascón. Por otro lado, el talento asiático también se enfatiza en Video Box, la sección de videoarte en la que se exponen piezas de artistas de las seis galerías más representativas de esta región, incluyendo Vietnam, Singapur, Filipinas e Indonesia.
Las temáticas que más tratan los artistas de esta edición están relacionadas con los efectos de la pandemia o con la relación que existe entre naturaleza y tecnología, enfoques que no podían faltar en los tiempos que corren. Entre las obras que retratan la relación humanidad-tecnología encontramos Blog affair, de María Alcaide, un video que plasma el auge de internet como medio de trabajo influencer a modo de parodia, o Social Distancing Series, de Pep Vidal. Para explorar lo que nos trae edición en otros formatos, la feria virtual también tiene un tour paralelo en Artsy, así que no quedan excusas. Todo esto y más, al alcance de un click.