Entre la ría de Vigo y Pontevedra se concentran algunos de los talentos y creativos más relevantes de los últimos años en el underground artístico gallego. Siempre vinculados al espíritu de la autoedición, en este panorama se forjan los artistas Óscar Raña y Cynthia Alfonso que hace ya casi medio lustro deciden crear el estudio de animación Rapapawn, cuyos trabajos puedes ver en vídeos de artistas como Dan Deacon, Holy Fuck o en la última reedición de Room on Fire de The Strokes. Entrevistamos al estudio gallego con motivo del estreno de La Maison du Bonheur, un video musical que acompaña al nuevo trabajo de los productores Mundo Prestigio.
¿Cómo formáis Rapapawn y cuál es vuestra trayectoria hasta llegar a montar el estudio?
Coincidimos en la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra hace cosa de 7 años. Por aquel entonces trabajábamos en el ámbito de la autoedición gráfica, sin mezclarnos demasiado. Poco después, siendo conscientes de nuestra afinidad tanto académica como estilística, empezamos a involucrarnos en publicaciones de manera conjunta. Es en este punto cuando la curiosidad por ver nuestro trabajo gráfico en movimiento se hizo patente y nos lanzamos a hacer nuestro primer videoclip, momento en el que nacería Rapapawn, hace ya 4 años.
Curioso el nombre, ¿de dónde viene?
La gracia estaba en dar con una palabra que no existiese. ‘Rapapaun’ era un latiguillo que se popularizó entre nuestro grupo de colegas durante un tiempo. Creo recordar que se usaba de manera parecida al ‘yada-yada’ de Seinfeld.
De alguna manera ambos estáis muy relacionados con la música, tanto en para quien son los trabajos que realizáis como en la forma de trabajar la imagen, los ritmos, las texturas… ¿Qué relación tenéis con esta disciplina?
Siempre nos pareció interesante buscar conjunciones entre lo visual y lo sonoro. Quizás el carácter orgánico de nuestras animaciones les confiere un ‘algo’ musical que propicia un mayor ensamble con esta disciplina. Por otro lado, el recurso del bucle, tan presente en nuestro trabajo, guarda una clara afinidad con los diversos patrones de repetición que abundan en la música popular contemporánea (la electrónica, el hip hop, etc.). También la abstracción nos sirve como vía para potenciar esta compatibilidad, asumiendo que lo sonoro está siempre adscrito a un lenguaje temporal de orden abstracto que permite asociaciones con la imagen videográfica muy potentes.
La forma de trabajar que tenéis es bastante particular. No hay muchos estudios que hagan animación con este estilo tan característico cercano al cómic contemporáneo. ¿De dónde salió la idea? ¿Qué os ha inspirado hasta llegar aquí?
El cómic es un lenguaje secuencial, al igual que la animación. Son disciplinas que de algún modo comparten vínculos y ciertos recursos. Es por esto que la idea de trasladar nuestra obra de un campo a otro surgió de manera natural y espontánea pero, sobre todo, de una necesidad de avance y experimentación en nuestra propuesta gráfica.
En este sentido, conectar y practicar simultáneamente varias disciplinas nos ayuda a expandir miras. Por ejemplo, para nosotros trabajar la animación nos permite tener una mayor facilidad a la hora de dar continuidad a las historias en formato cómic y, a su vez, este último aporta a la animación, además del grafismo, el factor matérico, que en este caso es la técnica risográfica, un método de impresión cuyos resultados son de una vivacidad muy especial. Esta permanente vinculación es la que nos permite crecer en todos los terrenos que tocamos.
En este sentido, conectar y practicar simultáneamente varias disciplinas nos ayuda a expandir miras. Por ejemplo, para nosotros trabajar la animación nos permite tener una mayor facilidad a la hora de dar continuidad a las historias en formato cómic y, a su vez, este último aporta a la animación, además del grafismo, el factor matérico, que en este caso es la técnica risográfica, un método de impresión cuyos resultados son de una vivacidad muy especial. Esta permanente vinculación es la que nos permite crecer en todos los terrenos que tocamos.
Tenéis mucha relación también con el mundo del cómic y la autoedición, ¿qué nos podéis contar de esto?
El cómic y la autoedición fueron el germen de todo (y siguen siéndolo). Actualmente seguimos publicando y autoeditando. Comprendemos la secuencia como un campo de creación y la publicación como un medio popular y accesible. Continuaremos trabajando en este ámbito porque nos concede la libertad artística necesaria para no volvernos locos en este sector.
El vídeo de Maison du Bonheur que habéis hecho para Mundo Prestigio tiene una línea estética muy marcada que está muy presente en casi todos vuestros trabajos. ¿Cómo os enfrentáis a una propuesta como esta y qué peso otorgáis a la narrativa a la hora de desarrollar los videoclips? ¿Cómo es el proceso creativo detrás de una pieza así?
Una de nuestras máximas es tratar de alejarnos en la medida de lo posible del concepto canónico de videoclip. Aspiramos, en primer lugar, a que el proceso creativo tenga un fuerte componente experimental; esto es que exista un abordaje del medio que explore sus posibilidades y cuestione sus estándares constitutivos. De este modo la narrativa visual se va perfilando sobre la marcha, normalmente en base a asociaciones entre la forma, el color y el movimiento; atendiendo siempre a las relaciones de afinidad que observamos entre nuestras imágenes y los distintos segmentos de la pieza musical.
También nos interesa que el montaje tenga un sentido propio, en tanto que metraje independiente, sin que el contenido esté supeditado a la letra (en caso de que la hubiera) o a correspondencias figurativas con, por ejemplo, la imagen del grupo (los rostros de los músicos, sus instrumentos, etc.).
Para esta ocasión Mundo Prestigio nos brindó libertad creativa absoluta, de ahí que hayamos podido poner en práctica las premisas mencionadas anteriormente. Esto no ocurre normalmente, claro.
También nos interesa que el montaje tenga un sentido propio, en tanto que metraje independiente, sin que el contenido esté supeditado a la letra (en caso de que la hubiera) o a correspondencias figurativas con, por ejemplo, la imagen del grupo (los rostros de los músicos, sus instrumentos, etc.).
Para esta ocasión Mundo Prestigio nos brindó libertad creativa absoluta, de ahí que hayamos podido poner en práctica las premisas mencionadas anteriormente. Esto no ocurre normalmente, claro.
El nivel de detalle y de precisión que se aprecia en vuestros trabajos es realmente sorprendente. Se ve que hay muchas horas de curro detrás de cada pieza que hacéis y mucha artesanía. Explicadnos un poco cómo es el proceso de producción y algo sobre las técnicas que utilizáis.
Es una labor realmente intensa para dos personas porque construimos la secuencia fotograma a fotograma y, aunque el medio para hacerlo sea digital, optamos por trabajar de una manera tradicional. Esto nos permite cometer errores y generar en lo geométrico un movimiento más imperfecto y personal, rompiendo así el hieratismo de las figuras. Además, nos permite alejarnos de los automatismos predeterminados que pueden ofrecer determinados programas.
Pese a vuestra corta trayectoria con el estudio y no residir en una gran ciudad habéis conseguido trabajar para artistas como Dan Deacon, Holy Fuck, The Strokes y compañías como WeTransfer. ¿Cómo os llegan estas propuestas?
No existe una fórmula mágica. Nuestro modus operandi ha consistido únicamente en trabajar mucho y perseverar hasta que un día te contactan (tópicos que se cumplen). Esto muchas veces comporta un proceso de avance a ciegas que te come mucho tiempo, y que no sabes si germinará o no en algo... puede resultar desesperante por momentos. A nosotros nos ayuda el eco que podamos generar desde nuestros perfiles personales como artistas gráficos, que tampoco es mucho, pero nos brinda un impulso extra.
¿Creéis que existe en España espacio para poder desarrollar una carrera en vuestra disciplina o solo es posible si accedes a mercados extranjeros? ¿Qué formas tenéis de acceder a ese tipo de mercados?
Para nosotros es impensable la posibilidad de hacer carrera en España únicamente. El mercado extranjero es necesario, y la principal manera de acceder a él es mediante el uso constante de las redes sociales como expositores de nuestra obra, así como herramientas de captación de clientes. España debería tomar nota de muchas cosas.
¿Qué planes tenéis a corto, medio y largo plazo?
Actualmente estamos trabajando de manera individual en cómic; Óscar con la editorial Apa-Apa. Como colectivo tenemos varios proyectos en marcha, un par de videoclips a la vista y una exposición a la que en breves le empezaremos a dar forma. Si todo va bien, para el año nos gustaría empezar con lo que será nuestro primer corto de animación.