Hace tiempo que se viene viendo: los 2000 están de vuelta. Esos años en los que parecía una genial idea ponerse un vestido sobre un pantalón, llevar los bajos de los pantalones arrastrados hasta destrozarse o colocarse manguitos para acompañar camisetas sin mangas no tienen nada que ver con la propuesta que Pull&Bear nos trae de mano de Tini. Aquí, la ensoñación vuelve a estar presente en una colección cápsula que en un ejercicio de estilo personal, plasma el carácter auténtico de la artista.
Transparencias, drapeados, cortes asimétricos y tejidos en red son clave en la colección cápsula de la cantante para Pull&Bear. Vestidos largos, jeans y tops dan un carácter festivo que llega como una premonición del verano. Todos ellos juegan con colores negros –porque, ¿quién dijo que el negro no era para verano?–, fucsias y tonos metalizados. Este último da el vestido clave de la colección: el vestido de rejilla.
Ya a la venta en tiendas seleccionadas y pullandbear.com