Artista, pensador, activista... La práctica artística de Ai Weiwei (Beijing, 1957) aborda cuestiones apremiantes de nuestro tiempo. Es una de las principales figuras culturales de su generación y un ejemplo de libertad de expresión tanto en China como a escala internacional. En la exposición Ai Weiwei: entrelazar, el artista disidente chino presenta en el parque y edificio de la Fundación Serralves de Oporto obras que reflejan su interés por el medioambiente y su preocupación por la deforestación de la Mata Atlántica brasileña.
Las esculturas de Ai Weiwei que componen Iron Roots encarnan lo que queda de lo que una vez fueron gigantes verdes y son referentes de las consecuencias actuales de la mutación codiciosa del entorno natural. Al contemplar estas “raíces de hierro” con nombres propios, se puede llegar a comprender el valor primigenio de los bosques, los pulmones del mundo que proporcionan el oxígeno necesario para respirar.
Junto a las Iron Roots, el parque de Serralves acoge en primicia el Pequi Tree, un árbol-obra de arte también de hierro de treinta y dos metros de altura que actúa como testigo de la desaparición de la coexistencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza. Moldeado en Brasil, fundido en China, y ahora instalado en este espacio natural, este fragmento fálico ha pasado de la madera al metal y de lo mortal a lo eterno como una pieza de evidencia y, a la vez, como un monumento.
Junto a las Iron Roots, el parque de Serralves acoge en primicia el Pequi Tree, un árbol-obra de arte también de hierro de treinta y dos metros de altura que actúa como testigo de la desaparición de la coexistencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza. Moldeado en Brasil, fundido en China, y ahora instalado en este espacio natural, este fragmento fálico ha pasado de la madera al metal y de lo mortal a lo eterno como una pieza de evidencia y, a la vez, como un monumento.
Desde sus primeras posturas iconoclastas con respecto a la autoridad y la historia, la producción ‘artivista’ de Ai Weiwei se ha extendido hasta abrazar la arquitectura, el arte público y la performance. Más allá de la preocupación por la forma o la protesta, mide ahora la existencia del ser humano en relación con las fuerzas económicas, políticas, naturales y sociales, acoplando la artesanía a la creatividad conceptual.
Concebida para el parque y la sala central del museo de la Fundación Serralves, Ai Weiwei: entrelazar ha sido comisariada por Philippe Vergne y Paula Fernandes con el apoyo del estudio del artista, la Lisson Gallery y neugerriemschneider, Berlín. La exposición aborda el concepto de árbol como fenómeno biológico y como metáfora. En 1940, el padre de Ai Weiwei, el poeta Ai Qing, escribió el poema Trees1, en el que sugiere que los árboles pueden comunicarse entre sí bajo la tierra, a través de sus raíces. De ahí surge Iron Roots y Pequi Tree; las raíces fueron uno de los objetivos esenciales de la investigación de Ai Weiwei durante su estancia en Brasil en 2017.
Strength, Palace, Fly, Mr. Painting, Martin, Level y Party son los nombres de las siete raíces de hierro repartidas por el parque de Serralves. Las raíces de un árbol pequi —antiguo árbol autóctono de Brasil— descubiertas en el municipio de Trancoso de Bahía, consiguieron germinar hasta convertirse en estas obras de arte. Ai Weiwei convocó a artesanos chinos y brasileños para ensamblar cada pieza a partir de dos o tres raíces diferentes. Tras el ensamblaje de los fragmentos, se crearon moldes de estas obras y se enviaron a China para fundirlas en hierro.
Concebida para el parque y la sala central del museo de la Fundación Serralves, Ai Weiwei: entrelazar ha sido comisariada por Philippe Vergne y Paula Fernandes con el apoyo del estudio del artista, la Lisson Gallery y neugerriemschneider, Berlín. La exposición aborda el concepto de árbol como fenómeno biológico y como metáfora. En 1940, el padre de Ai Weiwei, el poeta Ai Qing, escribió el poema Trees1, en el que sugiere que los árboles pueden comunicarse entre sí bajo la tierra, a través de sus raíces. De ahí surge Iron Roots y Pequi Tree; las raíces fueron uno de los objetivos esenciales de la investigación de Ai Weiwei durante su estancia en Brasil en 2017.
Strength, Palace, Fly, Mr. Painting, Martin, Level y Party son los nombres de las siete raíces de hierro repartidas por el parque de Serralves. Las raíces de un árbol pequi —antiguo árbol autóctono de Brasil— descubiertas en el municipio de Trancoso de Bahía, consiguieron germinar hasta convertirse en estas obras de arte. Ai Weiwei convocó a artesanos chinos y brasileños para ensamblar cada pieza a partir de dos o tres raíces diferentes. Tras el ensamblaje de los fragmentos, se crearon moldes de estas obras y se enviaron a China para fundirlas en hierro.
Pequi Tree, por su parte, comenzó a gestarse en 2017 durante un viaje de investigación de Ai Weiwei a Sudamérica. En la Mata Atlántica brasileña el artista encontró un árbol pequi moribundo y hueco de más de mil dos cientos años de antigüedad. Un año después, se desplazó con su equipo hasta el bosque y realizaron moldes de plástico del interior y exterior del árbol. Hicieron falta cien personas y 3 años de trabajo para dividir el molde en segmentos y posteriormente fundirlo y soldarlo.
La obra Two Figures, expuesta en el interior de la fundación, enlaza implícitamente con la ostensible sexualidad de la cultura brasileña. Ai Weiwei y una modelo brasileña contratada fueron modelados por profesionales alemanes. De los moldes resultantes surgieron estas figuras de yeso. La instalación también incluye semillas de ormosia —árbol originario de Sudamérica— que entroncan con un recuerdo infantil de Ai Weiwei: su padre le había mostrado las mismas semillas durante su infancia.
La obra Two Figures, expuesta en el interior de la fundación, enlaza implícitamente con la ostensible sexualidad de la cultura brasileña. Ai Weiwei y una modelo brasileña contratada fueron modelados por profesionales alemanes. De los moldes resultantes surgieron estas figuras de yeso. La instalación también incluye semillas de ormosia —árbol originario de Sudamérica— que entroncan con un recuerdo infantil de Ai Weiwei: su padre le había mostrado las mismas semillas durante su infancia.
Ai Weiwei: entrelazar, está disponible en la Fundación Serralves de Oporto hasta el 9 de julio.