Empezó con tonos pastel pero ahora sus obras son una explosión de colores chillones. Para Agnès Ricart, dibujar es tan importante como respirar o comer; básico, impulsivo, inherente. Desde los Teletubbies hasta las Bistecs, su universo pop y algo kitsch refleja los tiempos en los que vive. Por eso, también, lleva tiempo unida a la causa feminista, a favor de la que lucha a través del arte. Hoy descubrimos a esta artista valenciana con planes para adentrarse en el mundo de la moda, en el sector editorial, y conquistar el hemisferio sur.
Para quien no te conozca, ¿podrías presentarte? ¿Quién es Agnès Ricart?
Soy una ilustradora y artista visual basada en Valencia. Tengo veintisiete años y crecí en una aldea en medio del campo. Me trasladé a la ciudad hace diez años para estudiar Bellas Artes y un máster en Producción Artística. Tras finalizar mis estudios y trabajar en un estudio de diseño gráfico, decidí empezar a ilustrar y diseñar por mi cuenta hace aproximadamente un año y medio.
Todos, desde pequeños, nos ponemos a dibujar, pero con el tiempo, la mayoría lo va dejando. ¿Cuándo te das cuenta que tú no, que para ti es algo natural e incluso necesario? ¿Cómo se convierte en tu profesión?
Para mí es algo tan básico como comer o dormir, siempre lo he hecho de manera compulsiva y catártica, desde los tres años de edad. Nunca lo dudé y nunca me he planteado dejar de dibujar ni de pintar porque es parte de mi cuerpo y de mi mente, y no lo concibo como un acto independiente de mi vida.
Tu estilo es muy marcado y vemos una coherencia en todas tus obras, ¿pero cómo has llegado hasta aquí?
Siempre he pintado de manera analógica, sobre papel y lienzo. Cuando decidí empezar con la ilustración tanteé un poco con acuarelas y gouache, pero pronto me di cuenta de que implicaba mucho más trabajo posterior de digitalización y yo soy bastante impulsiva y necesito pasar a la acción con rapidez para aprovechar la energía inicial. En cuanto a mi estilo, es algo que se ha desarrollado de forma natural mediante la práctica y que evoluciona de manera casi autómata cuando dibujo por placer. Soy muy fan de la pintura clásica y por este motivo siempre trabajo con motivos realistas, aunque también me fascina la abstracción.
Tu trabajo está marcado por los tonos rosas, rojos, amarillos y azules. Todo muy chillón, algo artificial, incluso. Creas un universo repleto de colores estridentes. ¿Lo entiendes como una de las claves de tus obras?
Entiendo mi paleta cromática como algo fluido que tiene que ver con mi desarrollo personal. Al principio empecé utilizando tonos mucho más suaves y pasteles, así como composiciones más estables y algo rígidas. Los colores que utilizo actualmente nacen de una mayor dosis de energía contenida y de mucha más fluidez a la hora de crear digitalmente, lo que me permite experimentar más profundamente y disfrutar mucho del proceso.
Además de los colores brillantes retratas personajes como los Teletubbies o los Power Ranger. Muy pop, todo. ¿Qué te inspira a la hora de crear?
Lo que me interesa especialmente de estos clásicos de la cultura infantil es su estética colorida y algo kitsch. Me inspiro fácilmente mientras estoy en movimiento, de manera espontánea, y muy a menudo inconscientemente. Es decir, todas las ilustraciones que desarrollo de manera personal parten de una imagen que se forma en mi cabeza desde un impulso inconsciente, previamente originado por un sentimiento o sensación interna que necesita ser extrapolada a imagen tangible.
Has ilustrado a personajes como las Bistecs, Gloria Fuertes, modelos de Palomo Spain, e incluso los ya mencionados Teletubbies. ¿Qué debe tener alguien para que quieras retratarlo?
Ilustro a artistas y creativos que me gustan personalmente, ya que disfruto mucho con los retratos. La estética es la parte superficial de la elección, ya que mis intereses a la hora de retratar son más bien conceptuales. Me fijo en iconos de la cultura que me atraen por su gran capacidad creativa y su manera de explorar los limites.
Usas constantemente hashtags como #girl #power #queer #feminist. La lucha feminista está presente en tu imaginario. ¿En qué nivel consideras que tu trabajo es feminista o puede suponer una reivindicación? ¿Qué mensaje de lucha se esconde tras tus obras?
Considero que mi trabajo es feminista en la medida en que nace de mi experiencia como mujer en un mundo de y para hombres. Creo que es especialmente importante potenciar la visibilidad de todas las temáticas que giren en torno a la educación sexual, el género y la equidad como clave para ampliar nuestra percepción al respecto, y el arte es una manera de hacerlo en profundidad.
Las protagonistas de tus ilustraciones son mujeres aunque también incluyes varios hombres. ¿Como encajan en tu protesta?
Opino que la revolución parte de sanar las heridas entre géneros y que toda acción debe ser inclusiva.
Nos encontramos en un momento en el que el feminismo está presenta en el debate público. Gran cantidad de artistas hablan de la lucha contra las injusticias y de esa reivindicación por la igualdad. Para ti, ¿qué debe tener una obra para poder calar y llegar a concienciar al público?
Creo que la clave es la potencia. Si algo está creado con toda la energía y entrega posible, eso se nota y se transmite, generando los mismos sentimientos en la persona que lo percibe.
¿Dónde te gustaría ver tus ilustraciones en el panorama reivindicativo?
Me gustaría mucho trabajar más en el sector editorial y también desarrollar ilustraciones para proyectos de concienciación infantil.
Has adaptado tu trabajo a prendas como camisetas, sudaderas o tote bags. ¿Qué te aporta llevarlo a nuevos formatos como puede ser la moda? ¿Te gustaría poder adaptarlo a otros?
Sí, me interesa mucho la industria de la moda y me gustaría explorar las posibilidades que pueden ofrecer colaboraciones de este tipo. También me gustaría mucho adaptar mis ilustraciones al formato mural para ver cómo pueden interactuar con la arquitectura y el entorno.
Para finalizar. ¿Planes de futuro? ¿Dónde te gustaría ver tu trabajo en un par de años?
Para el futuro inmediato estoy desarrollando colaboraciones con varias marcas de ropa que verán la luz en otoño/invierno, así como un pequeño cómic de temática amorosa que espero editar en breve. En un par de años me gustaría llevar mis ilustraciones a grandes formatos y moverlas en galerías del hemisferio sur.