Esta primavera Nimph lanza su cuarta colección: Amore hardcore. Un nuevo capítulo que nos conduce a través de texturas, materiales y combinaciones que cuestionan el status quo, lo tradicional, y borran la línea del género y de lo establecido a través de la sostenibilidad. Amore hardcore es la fusión entre contrarios, es el amor incondicional, la unión de conceptos dispares para encontrar un lenguaje compartido.
Nimph, como en cada una de sus colecciones, nos sumerge en un universo creativo lleno de fantasía, misticismo y significados oníricos. Y es que para el equipo de Nimph, tan importante es compartir el proceso creativo, como lo es el resultado de la colección.
La última vez que hablamos con Patty Mañá, directora creativa de Nimph, fue en 2020, cuando acababa de lanzar su primera colección. Mucho ha cambiado desde entonces en el mundo y también en el equipo de esta marca que aboga por la sostenibilidad, la inclusividad y la diversidad. Durante estos 3 años, Nimph se ha enfrentado a muchos retos, y contra todo pronóstico, este proyecto que comenzó en un pequeño atelier en el Barrio de Gràcia de Barcelona consiguió desfilar en la Madrid Fashion Week 2021. Un gran reto para la marca, que presentaba su segunda colección llamada The Descent, integrada por cuarenta y cinco piezas que nos transportaron a través de un universo de fantasía en las que las líneas de género se borraron y el amor diverso y la naturaleza florecieron.
Mucho han aprendido y madurado desde entonces Mañá y su jefe de atelier Jordi Peralvo, que lejos de quedarse en la comfort zone, no han parado de explorar y trabajar con nuevas técnicas para mejorar la marca. Y es este Amore hardcore, este cuarto capítulo, esta nueva colección, la que culmina su viaje en equipo a través del diseño. Amore hardcore no solamente utiliza la técnica upclycling que caracterizaba a la marca, también trabaja con tejidos reciclados y deadstock. Pero eso no es todo. Nimph nos regala una colección de veintidós piezas en las que predomina el estudio en profundidad de la prenda, y el trabajo a consciencia para hacerla diversa, convertible. Faldas maxi con cremalleras que se convierten en faldas mini y un sinfín de piezas transformables.
Amore hardcore también es una colección de contrarios, colores asociados con la ‘feminidad’ tradicional sobre grises ‘masculinos’, rasgos del fútbol y el ballet que convergen, tejidos imposibles unidos en una sola pieza... Sin duda, una colección que ilustra la madurez y el crecimiento de la marca que arrancó en 2020 y que seguro que seguirá sorprendiéndonos colección tras colección.
La última vez que hablamos con Patty Mañá, directora creativa de Nimph, fue en 2020, cuando acababa de lanzar su primera colección. Mucho ha cambiado desde entonces en el mundo y también en el equipo de esta marca que aboga por la sostenibilidad, la inclusividad y la diversidad. Durante estos 3 años, Nimph se ha enfrentado a muchos retos, y contra todo pronóstico, este proyecto que comenzó en un pequeño atelier en el Barrio de Gràcia de Barcelona consiguió desfilar en la Madrid Fashion Week 2021. Un gran reto para la marca, que presentaba su segunda colección llamada The Descent, integrada por cuarenta y cinco piezas que nos transportaron a través de un universo de fantasía en las que las líneas de género se borraron y el amor diverso y la naturaleza florecieron.
Mucho han aprendido y madurado desde entonces Mañá y su jefe de atelier Jordi Peralvo, que lejos de quedarse en la comfort zone, no han parado de explorar y trabajar con nuevas técnicas para mejorar la marca. Y es este Amore hardcore, este cuarto capítulo, esta nueva colección, la que culmina su viaje en equipo a través del diseño. Amore hardcore no solamente utiliza la técnica upclycling que caracterizaba a la marca, también trabaja con tejidos reciclados y deadstock. Pero eso no es todo. Nimph nos regala una colección de veintidós piezas en las que predomina el estudio en profundidad de la prenda, y el trabajo a consciencia para hacerla diversa, convertible. Faldas maxi con cremalleras que se convierten en faldas mini y un sinfín de piezas transformables.
Amore hardcore también es una colección de contrarios, colores asociados con la ‘feminidad’ tradicional sobre grises ‘masculinos’, rasgos del fútbol y el ballet que convergen, tejidos imposibles unidos en una sola pieza... Sin duda, una colección que ilustra la madurez y el crecimiento de la marca que arrancó en 2020 y que seguro que seguirá sorprendiéndonos colección tras colección.