Un año más llega a Gijón uno de los festivales de arte digital y sonoro más interesantes del panorama internacional: L.E.V. Como siempre, lo hace con una programación cargada de premieres –tanto mundiales como españolas–, artistas y espectáculos que exploran los límites entre lo digital, lo sonoro, lo audiovisual y lo experimental. Del 2 al 5 de mayo, no te pierdas la 13ª edición del festival organizado por la plataforma Laboratorio de Electrónica Visual.
Empezamos nuestras recomendaciones con una première mundial, la de Alex Augier y Alba G. Corral. Coproducido por el propio festival junto a Arcadi y La Muse en Circuit, el francés y la española presentan en el Teatro de La Laboral el espectáculo en vivo ex(O), la segunda parte de un díptico audiovisual inspirado en la naturaleza y el mundo biológico.
En primicia mundial encontramos también el espectáculo Delta-T, de los reconocidos Matthew Biederman y Pierce Warnecke. Coproducido por L.E.V., la performance investiga y explora, a través de lo audiovisual, algunas de las teorías y estudios más recientes de física cuántica –que involucran la gravedad, el tiempo y su relatividad. Puedes esperar aceleraciones estroboscópicas, glitches, y saltos hacia delante y atrás que muestran una perspectiva no-linear de la música y la creación sonora.
También presentan en exclusiva su espectáculo Synspecies el español Elías Merino y el esloveno Tadej Droljc. El dúo toma la naturaleza como punto de partida; en su caso, son las ecologías virtuales, las ‘synspecies’, unos objetos audiovisuales de múltiples escalas “que se adaptan, mutan, y luchan por su propio espacio y existencia”, y que acaban creando “espacios morfológicos inestables”, una especie de caos en constante desintegración.
Lo que se está desintegrando cada vez más, y en el mundo que trasciende lo virtual, es el Reino Unido. Del Brexit precisamente habla Pastoral, el último álbum de la polifacética Gazelle Twin. La británica está de gira presentando este espectáculo en el que se disfraza de bufón de una corte imaginaria del siglo XXI, en el que critica el caos político de su país en un espectáculo con claras influencias de Fever Ray o Björk. Con esta última artista ha colaborado estrechamente Lanark Artefax, una de las voces experimentales que más suenan últimamente. En el festival presentará Monolith, un espectáculo audiovisual en el que le acompaña Shaun Murphy.
Otro dúo que presenta espectáculo, esta vez como première en España, es el formado por Caterina Barbieri y Ruben Spini. Los italianos colaboran en el primer show A/V de Caterina, una investigadora sonora que hace estragos allí por donde pasa. Comisionada por el prestigioso Atonal en Berlín, el espectáculo crea un paisaje sonoro al que el público puede viajar con todos sus sentidos.
De Alemania también llega el colectivo Transforma y su performance Manufactory, cuya música va a cargo de Sascha Ring (Apparat). Entendida como lo que Wagner consideraba una ‘gesamtkunstwerk’ (una ‘obra de arte total’), el espectáculo explora la artesanía y la repetición y los extrapola a distintos géneros y tesituras. Entendida como una mezcla entre obra de teatro e instalación en directo, Manufactory es una de las piezas más complejas que presenta el festival.
En otro registro, el australiano Robin Fox visitará el L.E.V. por primera vez, y lo hará con un espectáculo creado para laser. La pieza, titulada Single Origin, es el tercero en esta línea, que explora la sinestesia, y que presentó por primera vez en el Unsound de Cracovia. Por su parte, Myriam Bleau trae al L.E.V. la performance Ballistics, creada para “interfaces de péndulos que toma su inspiración del misticismo y la ciencia ficción popular” en la que la canadiense usa objetos luminosos e inalámbricos.
Además de los múltiples shows y performances, L.E.V. cuenta con otras actividades. Entre ellas, dos instalaciones, la de Mathilde Lavenne y la de Refik Anadol. La primera, titulada Tropics, le valió a la artista francesa el premio Golden Nica en el festival Ars Electronica de Austria. Presentada en forma de expedición arqueológica 3D, la obra gira en torno a una familia granjera en México. La segunda, del turco Refik Anadol, se encontrará en el Espacio Fundación EDP – Iglesia de la Laboral. Bajo el título Melting Memories: Engram as Data Sculpture, la compleja instalación está compuesta por pinturas de datos, esculturas de datos aumentados y proyecciones de luz, y une ciencia, arte contemporáneo, memoria y representación.
Si cada vez son más los festivales que dirigen su mirada hacia los nuevos lenguajes creativos y las posibilidades todavía por explorar que ofrecen las nuevas tecnologías, L.E.V. se reafirma como uno de los pioneros y, además, sigue con su vocación de descubrir nuevos talentos a la par que programa algunos de los nombres más reconocidos de la escena. Toda una hazaña que no muchos pueden decir haber cumplido.
En primicia mundial encontramos también el espectáculo Delta-T, de los reconocidos Matthew Biederman y Pierce Warnecke. Coproducido por L.E.V., la performance investiga y explora, a través de lo audiovisual, algunas de las teorías y estudios más recientes de física cuántica –que involucran la gravedad, el tiempo y su relatividad. Puedes esperar aceleraciones estroboscópicas, glitches, y saltos hacia delante y atrás que muestran una perspectiva no-linear de la música y la creación sonora.
También presentan en exclusiva su espectáculo Synspecies el español Elías Merino y el esloveno Tadej Droljc. El dúo toma la naturaleza como punto de partida; en su caso, son las ecologías virtuales, las ‘synspecies’, unos objetos audiovisuales de múltiples escalas “que se adaptan, mutan, y luchan por su propio espacio y existencia”, y que acaban creando “espacios morfológicos inestables”, una especie de caos en constante desintegración.
Lo que se está desintegrando cada vez más, y en el mundo que trasciende lo virtual, es el Reino Unido. Del Brexit precisamente habla Pastoral, el último álbum de la polifacética Gazelle Twin. La británica está de gira presentando este espectáculo en el que se disfraza de bufón de una corte imaginaria del siglo XXI, en el que critica el caos político de su país en un espectáculo con claras influencias de Fever Ray o Björk. Con esta última artista ha colaborado estrechamente Lanark Artefax, una de las voces experimentales que más suenan últimamente. En el festival presentará Monolith, un espectáculo audiovisual en el que le acompaña Shaun Murphy.
Otro dúo que presenta espectáculo, esta vez como première en España, es el formado por Caterina Barbieri y Ruben Spini. Los italianos colaboran en el primer show A/V de Caterina, una investigadora sonora que hace estragos allí por donde pasa. Comisionada por el prestigioso Atonal en Berlín, el espectáculo crea un paisaje sonoro al que el público puede viajar con todos sus sentidos.
De Alemania también llega el colectivo Transforma y su performance Manufactory, cuya música va a cargo de Sascha Ring (Apparat). Entendida como lo que Wagner consideraba una ‘gesamtkunstwerk’ (una ‘obra de arte total’), el espectáculo explora la artesanía y la repetición y los extrapola a distintos géneros y tesituras. Entendida como una mezcla entre obra de teatro e instalación en directo, Manufactory es una de las piezas más complejas que presenta el festival.
En otro registro, el australiano Robin Fox visitará el L.E.V. por primera vez, y lo hará con un espectáculo creado para laser. La pieza, titulada Single Origin, es el tercero en esta línea, que explora la sinestesia, y que presentó por primera vez en el Unsound de Cracovia. Por su parte, Myriam Bleau trae al L.E.V. la performance Ballistics, creada para “interfaces de péndulos que toma su inspiración del misticismo y la ciencia ficción popular” en la que la canadiense usa objetos luminosos e inalámbricos.
Además de los múltiples shows y performances, L.E.V. cuenta con otras actividades. Entre ellas, dos instalaciones, la de Mathilde Lavenne y la de Refik Anadol. La primera, titulada Tropics, le valió a la artista francesa el premio Golden Nica en el festival Ars Electronica de Austria. Presentada en forma de expedición arqueológica 3D, la obra gira en torno a una familia granjera en México. La segunda, del turco Refik Anadol, se encontrará en el Espacio Fundación EDP – Iglesia de la Laboral. Bajo el título Melting Memories: Engram as Data Sculpture, la compleja instalación está compuesta por pinturas de datos, esculturas de datos aumentados y proyecciones de luz, y une ciencia, arte contemporáneo, memoria y representación.
Si cada vez son más los festivales que dirigen su mirada hacia los nuevos lenguajes creativos y las posibilidades todavía por explorar que ofrecen las nuevas tecnologías, L.E.V. se reafirma como uno de los pioneros y, además, sigue con su vocación de descubrir nuevos talentos a la par que programa algunos de los nombres más reconocidos de la escena. Toda una hazaña que no muchos pueden decir haber cumplido.
El festival L.E.V. se celebrará del 2 al 5 de mayo en distintos espacios de la ciudad de Gijón (España). Para consultar la programación completa, visita su página web.