La sensibilidad y delicadeza que evidencia el trabajo de un artista, diseñador o creativo es el reflejo de lo que ocurre en su mente a la hora de dedicarse a la pieza o al proyecto que lo ocupa. Es reflejo no solo de su situación mental en el momento sino también de la serie de referencias, momentos, sensaciones, opiniones y creencias que ha acumulado a lo largo de su vida, las cuales se han mezclado unas con otras y han dado lugar a lo que podría conocerse como identidad artística o simplemente, identidad. Existen diferentes tipos de obras y proyectos, unos en las que son fácilmente identificables estos factores, con los que podemos llegar a concluir con cierta certeza quien hay detrás de la pieza, pero otros son mucho menos intuitivos, más sutiles en su forma, donde se nos deja entrever que el trasfondo es mucho mayor a lo que la forma que tiene su superficie.
Stephania Yepes lleva muchos años desarrollando su discurso y sus relatos a través de la imagen, de las formas, de los colores y las texturas. Es evidente que en sus trabajos hay ciertos elementos que son constantes y a los que sin ir más allá, podemos concluir que son importantes para ella. Las mujeres, la diversidad, las tradiciones, la belleza en lo cotidiano, lo natural. No son temas extraños o ajenos para la mayoría, pero la forma de trabajar con ellos es muy propia, muy suya. En esta entrevista nos cuenta que hay detrás de lo que el ojo puede ver.