Si por algo destacan las obras de la catalana es por la explosión de colores, las rayas y los topos. “A más colores intensos y complementarios mejor, más éxtasis siento”. Pero no solo utiliza los colores como forma comunicativa, sino que va más allá. Combina el arte con el diseño de objetos creados de forma sostenible y prendas de ropa estampadas con sus cuadros. Igual que muchos otros profesionales del sector, la artista se ha visto afectada por la pandemia. La pintura fue durante el confinamiento, y sigue siendo, la clave para evadirse y no dejar de crear, por eso no es de extrañar que este nuevo año le depare proyectos que habrá que seguir de cerca.