Joan Porcel ha sabido ir más allá, ver y retratar lo que hay detrás de cualquier post o story de Instagram. Cámara en mano y transmitiendo su pasión por las historias veraces, logró con su ópera prima Samantha Hudson, una historia de fe, sexo y electro-queer convertir la viralidad en un vehículo para la intimidad, desvelando el universo de este icono erigido entre likes y referencias vintage, llamado Samantha Hudson. Pero Joan ha querido dar un giro de ciento ochenta grados con su documental Sempre dijous, aventurándose tras lo pasos de una artista completamente diferente, Júlia Colom, mostrando las inquietudes y los sueños de esta cantante mallorquina que apuesta por la naturalidad y la falta de artificios.