Nunca hasta hoy se ha realizado tanta fotografía. Es un idioma que ya pertenece a la sociedad, las nuevas generaciones se educan con la imagen. Además, ahora también tenemos una enorme educación fotográfica gracias a las muchas escuelas que existen, lo que permite una formación diversa e interesante.
La fotografía se mira y se ve desde muchas formas y puntos de vista. Para un contexto informativo, la credibilidad la han de ofrecer los medios y las vías periodísticas. Depender de imágenes cuya fuente no está contrastada es un riesgo, hay que matizar las cuestiones de qué, quién, cómo, cuándo y dónde para dar veracidad a esa imagen. Luego está la praxis sobre lo acontecido, que no sea una fotografía teatralizada y que esté dentro de un marco informativo real y sin sesgar. Para ello, los fotoperiodistas trabajan para dar esa información.
La pregunta es, ¿un fotoperiodista captura la información plenamente? Obviamente no. Da un retazo, un frame real de algo que está sucediendo ante él. Si hay una manifestación pacífica de miles de personas y solo dos, como circunstancia, queman un coche y el fotógrafo captura ese instante, es algo real que sucedió, pero puede que no sea lo principal de la noticia.