El barroco, en sus aspectos formal e ideológico, está, sin duda, muy presente en mi trabajo. Me provee de muchos recursos, la composición, la iluminación, el dramatismo, la metáfora, el movimiento, la teatralidad. También me gusta mucho la iconografía religiosa, el gusto por la alegoría, la exaltación de los sentidos, de lo patético, de lo mundano. Mis referentes son clásicos como Vermeer, Caravaggio, Velázquez, Rembrandt. Me sirvo de la estética vintage para encajar visualmente todos los elementos con los que trabajo.