Mi madre abrió una mercería cuando yo tenía 10 años, era un local enorme. Yo iba cada tarde después del colegio, me encantaba inventariar la mercancía. Años más tarde llegó el momento de decidir qué estudiar y la elección fue bastante fácil. Mis padres vieron que tenía muy claro estudiar diseño, me apoyaron en todo momento y se sacrificaron mucho para poder pagarme los estudios. Les estaré eternamente agradecida.
No voy a negar que ha sido difícil, todo depende de uno mismo, estás solo, y tienes que tomar decisiones en todo momento, e incluso de cosas en las que no tienes experiencia. Y de repente, todo te parece un mundo, pero por suerte siempre tuve muchísimo apoyo de mis familiares y amigos, desde que nació la idea hasta hoy, y me animaron a no desistir en los momentos más difíciles. El sprint final llegó hace algo más de un año, cuando conocí a un proveedor que se interesó en el proyecto desde el primer día y me ofreció todos los recursos que estaban a su alcance para hacer posible mi sueño.
En 2008 comencé a vivir con mi ex pareja, y me di cuenta de las limitaciones de encontrar un producto de moda íntima masculina diferente y de calidad. En aquel entonces estaba trabajando para Oysho, y en 2009 decidí dejar mi puesto de trabajo para seguir formándome y especializarme en ropa interior masculina en Londres con la idea de crear Fox Haus.
Fox Haus es una marca de moda masculina que muestra un estilo de vida contemporáneo, fiel a los valores del diseño y el confort, que intenta preservar la artesanía. También trata de ser sostenible, maximizando los impactos positivos en el medio ambiente y minimizando los negativos.
Como una persona que tiene muy claro que la vida hay que exprimirla hasta el final. Aquellos que dan siempre un paso al frente, que no tienen miedos y que han sabido darle sentido a su camino, sin caer en un formato de vida estandarizado. Llegar a la tumba derrapando y habiendo disfrutado al máximo del viaje. Eso para mi es lo más grande que nos puede pasar, amando, respetando y dando ejemplo. Ese es el estilo de hombre que sin duda busca Fox Haus.
No creo que haya que elegir, se trata de probar y escoger la opción que más le convenga a cada uno. Lo más importante es sentirse cómodo.
Seguramente influye, pienso que cada vez más gente escoge productos sostenibles en general, y somos cada vez más conscientes de la importancia de preservar el medio ambiente y cambiar las condiciones laborales a las que se someten muchos trabajadores, sobre todo dentro del sector textil. Las marcas tenemos una gran responsabilidad en esto, y es nuestro deber crear el mínimo impacto medioambiental y garantizar unas condiciones laborales óptimas, mientras que el cliente, tiene el derecho de adquirir productos de calidad a un precio justo para todos.
He tenido el placer de poder hacer muchos fittings con hombres diferentes en todos estos años (risas), y después de estudiar bien el patrón, hemos logrado un corte que sienta muy bien y que es muy cómodo. Aparte de esto, toda la línea de interior de Fox Haus lleva un 30% de lino de alta calidad, aportando frescura en esa zona tan delicada.
No lo descarto, de hecho muchas chicas me han pedido la versión femenina de los boxers, quizás en un futuro más lejano. Por el momento me gustaría crecer en este sector, tengo muchas ideas que quiero poner en práctica.
Tengo que ser realista con el 2015, el tiempo pasa volando y me gustaría implicarme en varios proyectos. De momento una idea que me gustaría poner en práctica es trabajar prendas con tejidos y estampados de pequeños colectivos de artesanos para dar a conocer y preservar sus técnicas. Comenzar por algo pequeño, y si funciona poder trabajarlo a nivel global. También me gustaría hacer colaboraciones con diseñadores creando piezas diferentes, y aumentar la cartera de productos hacia otras vertientes dentro de la moda masculina que no solo se limiten a la ropa interior.




