Pronto trataremos ese tema en una exposición colectiva junto con Bran Sólo, Fran Muñoz y yo. La exposición habla del ‘Hombre perfecto’, y cada uno de nosotros aborda el suyo desde su punto de vista.
Creo que la figura del macho alfa machista y autoritario que ha imperado tiempo atrás ha mermado otras figuras masculinas más sensibles. Los hombres sensibles y buenos, los hombres homosexuales, también son eso: hombres. Pero se les ha hecho creer que su forma de ver o entender la vida no se correspondía con la de su condición. Yo me centro especialmente en la figura homosexual, porque me gustan los hombres y porque pienso que un hombre puede llegar a ser lo más hermoso, misterioso, increíble y mortal del mundo.
Mi hombre perfecto es un hombre masculino, inteligente, sensible, con miedos pero sin miedo a enseñarlos, un hombre con heridas en las rodillas de caerse y heridas en la cabeza de levantarse y golpearse con la losa de un mundo para el que a veces piensa que no está preparado.