Y es que Dora no para, pero no tiene prisa. Planea sacar un EP este año, pero sabe que tiene que tomarse más tiempo para empezar a trabajar en el álbum: “Quiero hacer una búsqueda muy cuidadosa y muy especial, no meterle ninguna prisa, pienso que tengo que hacer una serie de cosas antes de tomarme la libertad que quiero para concretar esa búsqueda de sonidos”. Y luego está la película de Paco León, cuyo rodaje ya está confirmado para finales de julio. Si 2020 fue un buen año en lo creativo, no parece que 2021 vaya a ser peor. Por lo pronto, ya tiene concierto confirmado el 16 de abril en Conde Duque, y forma parte de Titanas, el proyecto que acaba de presentar Delafuente, junto a mujeres como Amaral, Anaju, Belako, Rigoberta Bandini, Rozalén y Zahara.
No hay referencias a Bimba en esta entrevista, aunque parezca imposible no hacerlo. Así lo ha querido ella. Dora, que nunca quiso ser Dora Bosé. Que pasó de llamarse Dora Postigo a Dora Salvatore para acabar siendo simplemente DORA. Así, en mayúsculas, que es como le gusta llamarse. Sin apellidos. Sin muletas. Tampoco las necesita. Como no necesita acudir a lugares comunes, aunque los periodistas nos empeñemos en ello. Así que guardemos nuestras preguntas cotillas de siempre y hablemos de lo que importa. Hablemos de música.