Congregaron a una treintena de artistas en un habitáculo de apenas 70 m² en su ópera prima como plataforma establecida. Con motivo de su segunda acción performática, decidieron ponerse a prueba reuniendo a más de cincuenta artistas nacionales e internacionales en una exposición colectiva definida por la individualidad de las obras y la transitoriedad de la muestra.
Ahora, cuatro años después de su nacimiento oficial y tras haber hecho de sus eventos un imprescindible en la escena independiente madrileña, presentan su última acción, Edén. Una exposición multidisciplinar emplazada en la Casa de Campo que ensalza la inherente conexión del ser humano con la naturaleza más primaria, y al que se refieren como “uno de los eventos más especiales hasta la fecha”.