La colección consta de cuatro cabezas (rinoceronte, elefante, cerdo y gallina) y cuatro colas (pez, murciélago, pájaro y gamba); se trata de que crees tu propio animal y la idea se extrapola a los anillos, cinturones, collares y pendientes. Lo que quería conseguir es que la gente se involucrase con la marca, ya que si quieres llevar alguna de las piezas estás obligado a hacerlo. Los clientes se sorprenden cuando les digo, ya te he enseñado las cuatro cabezas y las cuatro colas, ¡ahora te toca a ti combinarlas! Me hace mucha ilusión cuando empiezan a mezclarlas y ven los diferentes híbridos de animales que van surgiendo, hasta que por un motivo u otro crean el animal con el que más se identifican.