Con la pregunta “¿Qué significa ser una mujer-joven-china en España?” se puso en marcha en 2018 el colectivo Cangrejo Pro. Recurren a la performance colectiva como medio de comunicación, realizando actividades que giran alrededor de la comunidad china en España. Buscan crear un espacio de diálogo e investigación que ampare a todas aquellas personas de la diáspora que lo quieran y necesiten.
Aunque ahora mismo se encuentran en un proceso de cambio, Cangrejo Pro continúa con su pieza performance Vamos al chino, que expone muchas de las injusticias y situaciones racistas que se han encontrado integrantes del grupo, así como muchas personas de la comunidad china. Aun así, ese proceso de cambio se mantiene, siempre con el objetivo de expandir el proyecto. Xirou Xiao nos habla sobre ello en esta entrevista.
¿Cómo nace Cangrejo Pro? ¿Lo hace a partir de una necesidad social? Al final, vuestro proyecto crea comunidad, une a las personas y les enseña o cuestiona el significado de la pertenencia.
Al principio nos unimos por la realización de una performance colectiva, Me importa un pepino en 2018 y 2019 en la Sala Arte Joven de la Comunidad de Madrid. Para esta performance, lancé una convocatoria abierta por redes sociales (WeChat) para buscar dentro de la comunidad china en Madrid alguien que estuviese interesado en participar en una propuesta así (parar gente que tuviera curiosidad y tiempo y no requería de experiencia previa). En esta pieza, nos preguntamos: ¿Qué significa ser una mujer-joven-china en España? La creación colectiva de esta performance es como un intento de responder a esta pregunta individual y colectivamente. En el mismo periodo, con otros compañeros estábamos trabajando otra propuesta sobre la Red de Diáspora China en España, y para organizar el primer encuentro en el Centro de Residencias Artísticas en Matadero Madrid. Entonces, después de la realización de esta pieza, casi al mismo tiempo, entramos al espacio de CRA para crear una nueva pieza, de allí, naturalmente, surgió la idea de formar un colectivo, llamado Cangrejo Pro. Lo hago y lo hacemos a partir de una necesidad personal y social.
Xirou Xiao es la fundadora de Cangrejo Pro, ¿cómo consigues poner en marcha todo el proyecto? ¿Encontrar a personas que no solo quieran participar, sino que además compartan la misma motivación y reivindicación respecto a la autodefinición y preocupaciones sociales de la comunidad china?
Sí, soy la iniciadora, pero para que el proyecto siga funcionando desde 2018 hasta ahora, hay varios factores importantes. Por un lado, desde las condiciones objetivas, tenemos la beca de CRA desde hace 3 años, y con este apoyo institucional tenemos el espacio de trabajo, algún presupuesto para mantener nuestra producción performativa y también la visibilidad y la legitimidad institucional. Por otro lado, son todas las integrantes que están vinculadas e implicadas en este proyecto, y es su proyecto también. Cada una encuentra su motivación propia y compartida durante estos 5 años. Hemos construido conjuntamente una identificación colectiva y específica. Todo el proceso de las creaciones colectivas de las performances es una herramienta e incluso una ‘excusa’ para crear un ‘estar juntas’, crear y crecer juntas. Obviamente el vínculo que hemos creado es el núcleo de todo, independientemente de lo que hacemos.
¿Por qué la performance colectiva?
Por varios motivos y con diferentes dimensiones, esto también precisamente es el tema central de la investigación de mi tesis doctoral, cómo la creación de la performance colectiva se puede construir desde una subcomunidad china en Madrid.
Desde mi punto de vista, os comparto resumidamente algunos puntos claves. A nivel personal, me gusta mucho este lenguaje artístico y creativo desde 2010, la performance es un lenguaje muy abierto en el que puede caber muchos lenguajes artísticos de cualquier manera. Para mí, esta multitud es atractiva, es la posibilidad, la apertura y la libertad de crear y expresar. El cuerpo, el espacio y el tiempo son elementos básicos para jugar y componer una performance, esta simpleza también es muy atractiva. Luego el mirar y ser mirada; la presencialidad en la performance en vivo crea una ‘comunidad de testigos’, es un proceso satisfactorio y empoderante, y destaco que con esto creamos para nosotras pero no solo para nosotras. También en general tenemos la necesidad de crear, es una canalización de nuestras emociones y pensamientos.
El lenguaje performativo también tiene un tono reivindicativo y crítico. El propio proceso de la creación genera vínculos entre las integrantes y la creación colectiva de la performance, es una herramienta que puede mostrar la heterogeneidad y la contemporaneidad de la diáspora china en España. Creemos que su poder de transformación y el cambio social generan soluciones y también esperanza. Finalmente, ¡nos gusta y nos divertimos mucho!
Desde mi punto de vista, os comparto resumidamente algunos puntos claves. A nivel personal, me gusta mucho este lenguaje artístico y creativo desde 2010, la performance es un lenguaje muy abierto en el que puede caber muchos lenguajes artísticos de cualquier manera. Para mí, esta multitud es atractiva, es la posibilidad, la apertura y la libertad de crear y expresar. El cuerpo, el espacio y el tiempo son elementos básicos para jugar y componer una performance, esta simpleza también es muy atractiva. Luego el mirar y ser mirada; la presencialidad en la performance en vivo crea una ‘comunidad de testigos’, es un proceso satisfactorio y empoderante, y destaco que con esto creamos para nosotras pero no solo para nosotras. También en general tenemos la necesidad de crear, es una canalización de nuestras emociones y pensamientos.
El lenguaje performativo también tiene un tono reivindicativo y crítico. El propio proceso de la creación genera vínculos entre las integrantes y la creación colectiva de la performance, es una herramienta que puede mostrar la heterogeneidad y la contemporaneidad de la diáspora china en España. Creemos que su poder de transformación y el cambio social generan soluciones y también esperanza. Finalmente, ¡nos gusta y nos divertimos mucho!
¿Creéis que hay otras maneras de llevar a cabo la mediación intercultural que lleváis vosotras a través de la performance? No lo sé, tal vez a través de ensayos, podcast…
Claro que sí, la performance solo es una de las herramientas que hemos elegido. Lo importante es encontrar un lenguaje que sea coherente con nuestros objetivos, lo que queremos y lo que nos sentimos cómodas e ilusionadas en este momento de la vida. Si queremos montar una empresa, ganar dinero y ser unas cangrejas ricas, también es válido.
Cangrejo Pro es arte, pero también es activismo. ¿Qué pensáis del término artivismo?
Este término para nosotras es solo un término. Quizás lo que hagamos está dentro de ese concepto, pero nosotras no nos autodefinimos así.
Decís que rompéis el estándar occidental del arte y la performance. ¿Cuáles son esos estándares y cómo os alejáis de ellos?
Por ejemplo, la actitud de dar por sentado lo correcto. Nuestro deseo es crear un lenguaje propio de la creación, y crear un sistema propio de organización y agrupación. Tampoco perdemos el tiempo ni energía en pelear con lo estándar.
A través de vuestra performance iniciáis todo un proceso de descubrimiento identitario, ¿qué diríais sobre las personas que asisten a vuestras performances? ¿Sobre vosotras?
Esto depende de qué tipo de público y su perfil, y también depende de las performances. Pero hay una cosa común, tanto para la gente de la diáspora china o no, es la primera vez que ven un grupo de jóvenes-mujeres-chinas juntas haciendo una performance, con nuestros cuerpos en presente, sacando las voces propias y directas; este acto en sí es muy potente.
Habláis de las “individualidades dentro de la colectividad”. ¿Creéis que esa individualidad viene precedida por prejuicios que se construyen fuera de las diásporas, pero se integran en ellas?
No, entendemos que la individualidad es la particularidad de cada una, como una persona, un sujeto concreto. Precisamente la suma de particularidades es una manera para mostrar la heterogeneidad de la diáspora china.
Uno de vuestros últimos trabajos es la performance colectiva Vamos al chino, que reflexiona sobre la seguridad o inseguridad de la comunidad china que gestiona tiendas en España. ¿Cómo es la realidad de estas personas?
Reciben mucha violencia y racismo.
¿Con qué idea inicial empezáis a desarrollar Vamos al chino?
Son experiencias reales de muchas integrantes del grupo, ante estas realidades, tenemos que hacer algo al respecto. Es la necesidad y la urgencia de hacer algo puro y duro.
También funcionáis como espacio educativo, ¿es esta performance una reflexión para todas aquellas personas que no pertenecen a la diáspora? ¿Una manera de ver la realidad?
Se puede entender de esta manera. Aparte de realizar una obra de arte con la performance, también realizamos talleres sobre la Creación Colectiva de la Performance y Antirracista con docentes, educadores sociales, adolescentes, familias u otras mujeres racializadas, etc.
¿Con qué dificultades os habéis encontrado en el mundo del arte?
La precariedad y la falta de regularidad.
También impartís cursos y talleres en clave cultural. ¿Cómo los realizáis? ¿Los solicita alguna institución? ¿Los iniciáis vosotras según los temas que creáis que deben tratarse?
Hasta este momento, todas las colaboraciones son invitaciones por algunas instituciones u organizaciones. Pero nosotras siempre tenemos claro lo que podemos y queremos hacer y ofrecer.
Otro de vuestros proyectos es Liwai Acción Intercultural, ¿en qué consiste? ¿Cuál es la metodología de trabajo?
Es una asociación cultural formada por mi compañera Yue y yo desde 2018. Nosotras en esta asociación aplicamos la metodología de la mediación intercultural y nuestro objetivo es la creación de una plataforma cultural, artística y social de la diáspora china en España. Realizamos varias acciones y colaboraciones.
¿Ahora mismo en qué punto se encuentra Cangrejo Pro? ¿Estáis trabajando en alguna otra performance o taller del que podáis hablarnos?
Estamos en la fase del cambio. Este año seguimos trabajando la pieza Vamos al chino, ya llevamos un año realizando esta pieza por toda España, pero cada vez que la realizamos volvemos a actualizar nuestro deseo en relación a esta pieza en este momento de nuestras vidas. Y luego estamos indagando la posibilidad de materializar más nuestra creación, por ejemplo, ya no nos sentimos satisfechas de solo realizar la performance en vivo, queremos que nuestra creación y potencia transmitirán más allá de la performance. Por ejemplo, tenemos la idea de hacer un fotolibro, jugando desde nuestros lenguajes performativos, etc.