Marta Marlo y Andrés Lim tenían clara una cosa cuando decidieron empezar con Blackpanda, y es que querían desarrollar sus propias ideas e historias bajo su propia marca y lenguaje. Y con canciones como Bailo x fuera lloro x dentro o She Is lo han conseguido. No se definen por un solo ritmo, hacen desde technohouse a algo más pop, pero como ellos mismos dicen: “Nosotros solemos anteponer el concepto o lo que queremos contar al estilo en sí”.
Hablamos con ellos sobre la producción de Quiero arder, el tema que presentó Agoney en Benidrom Fest, el Fools Tour junto a Mabbi y Edu García –que está apunto de arrancar y van a recorrer diferentes ciudades como Sevilla, Barcelona y Málaga– y sobre otros proyectos, como el que más ilusión les hace, Nicotina (y sí, nos explican de qué va el asunto).
¿Quiénes son las personas que están detrás de Blackpanda? ¿Podríais presentaros para aquellas personas que no os conocen todavía?
Somos un dúo de artistas madrileño formado por Marta Marlo (compositora, productora, cantante y graduada en Artes escénicas) y Andrés Lim (compositor, productor e ingeniero de sonido, especializado en diseño sonoro para cine). 
¿En qué momento decidís que vais a empezar con Blackpanda? Un grupo de música no son palabras menores, así que imagino que tal vez hubo algo que os hiciese lanzaros de cabeza a la piscina.
Nuestra formación y experiencia laboral siempre ha estado ligada a lo escénico y a lo audiovisual, normalmente trabajando para los proyectos de otras personas. Decidimos comenzar con Blackpanda para poder desarrollar nuestras propias ideas, contar nuestras propias historias bajo nuestra marca y visión artística, considerando la música un lenguaje universal que nos permitía albergar otras disciplinas que también formaban y forman parte de nuestra identidad.
Habéis producido Quiero arder, la canción que Agoney presentó en el Benidorm Fest como propuesta para Eurovisión 2023. ¿Cómo es ese momento en el que un cantante se pone en contacto con vosotros con un proyecto así?
Fue muy curioso porque inicialmente su equipo y él estaban buscando productores de música electrónica para su próximo álbum. Fue cuando creamos Quiero arder y a Agoney le flipaba. Meses más tarde nos llamaron para hacer una canción para el Benidorm Fest y creamos otra. A pesar de eso siempre teníamos Quiero Arder en la cabeza, porque nos parecía más arriesgada y creíamos que tenía un gran potencial escénico, por lo que finalmente se decantaron por ella y fue cuando se sumó Garabatto para coproducirla. Ha sido una oportunidad muy bonita, ver una canción tuya en la tele, que se reconozca tu trabajo de esa forma y que pueda llegar a tanta gente es muy emocionante.
Uno de vuestros temas que más lo ha petado es Bailo x fuera lloro x dentro, un tema electrónico noventero con toques de technohouse… ¿Qué creéis que hizo que tuviese ese boom? Personalmente creo que es por la temática, a la que el título le hace honor.
Qué guay que te guste, sin duda es una de nuestras favoritas. Creemos que la letra es un de retrato de nuestra generación, del contraste tan fuerte entre lo que sentimos y lo que mostramos, entre lo que somos y lo que aparentamos, entre nuestros sueños y la realidad, a veces oscura. Nos flipa tocarla en directo, porque a pesar de la crudeza de la letra, la peña la baila como en trance, tiene algo especial…
Vuestras letras, aunque mayoritariamente son español, también mezclan frases en inglés como en She Is y su “Corriendo en la carretera listen to the radio show. Don’t call her up, she doesn’t answer the phone”. ¿Qué supone eso a la hora de componer? ¿Tenéis más libertad? ¿Más maneras de expresar lo que queréis decir?
Yo normalmente escribía en inglés porque el mero hecho de expresarme en mi lengua materna me parecía una responsabilidad, con el lenguaje, con lo que quería contar… puede parecer contradictorio, pero le tenía mucho respeto al castellano, aunque me gustaba cómo sonaba mi voz en él. Durante la pandemia escribí ¿Qué me queda?, la canción más pura y honesta que he compuesto y que prácticamente vomité en castellano, creo, porque no podía haber sido de otra manera. La precisión de tu propio idioma y la honestidad desde la que puedes expresarte hace única tu escritura. Creo que el lenguaje sirve para eso, para expresarte con el código que en cada momento necesites, por eso de vez en cuando, intercalamos alguna frase en inglés o en francés, porque expresan justo lo que queremos en el momento concreto.
¿Y qué me decís de los géneros de vuestras canciones? Quiero decir, Como si nada y Naranja paraíso son dos ritmos completamente diferentes pero que mantienen la esencia del grupo, las escuchas y relacionas que vienen del mismo sitio. ¿En que os basáis en el momento de escoger un ritmo u otro?
Nosotros solemos anteponer el concepto o lo que queremos contar al estilo en sí. Una vez definimos eso, buscamos en los recursos creativos que conocemos que se adaptan mejor y que apoyan más nuestra idea. Sí bien, después de 3 años con el proyecto y de hacer propuestas sonoras, hemos llegado a establecer un sonido “Blackpanda” con el que nos sentimos identificados, independientemente del género o del estilo que protagonice cada tema y eso nos hace muy felices como artistas.
She Is supuso un punto de inflexión en vuestra carrera, tal vez el momento en el que el grupo se consolidó. La letra es potente: una mujer independiente que toma sus propias decisiones cuando y como quiere. Pero es que el videoclip es igual de potente, acaparando muy buenas críticas. Se ha hablado mucho de los elementos que aparecen en el videoclip: un descapotable y un desierto. ¿Simulan la libertad de la que habla la letra o es casualidad?
Muy poquitas cosas son casualidad, la mayoría de las decisiones creativas que tomamos intentan mantener coherencia entre nuestro discurso y la propuesta audiovisual. Desde luego esa canción es una declaración de intenciones y un deseo de libertad e independencia que intentamos, dentro de nuestras capacidades de entonces, llevar al videoclip a través de distintos símbolos.
¿En qué se inspira Blackpanda a la hora de componer canciones? ¿Cuáles diríais que son vuestros temas recurrentes?
Nos gusta vivir para poder contar. Normalmente nos inspiramos en situaciones que hayamos vivimos uno de los dos, en moods, estados de ánimo, personas o imágenes. Los temas más recurrentes son el amor y el desamor, el amor propio, la nostalgia, el futuro, nuestra propia generación y los temas sociales que nos tocan de cerca como la ansiedad, los sueños o los miedos que tenemos…
Habéis anunciado nuevo tour con cinco fechas y pasaréis por Sevilla, Barcelona, Madrid, Málaga y una ciudad que todavía es sorpresa. ¿Cómo se os presenta el Fools Tour? Que además no lo hacéis en solitario, sino que también vais con Mabbi.
¡Con muchísimas ganas de empezar ya! Es una propuesta muy especial en la que tocamos los mejores temas de cada grupo en un formato único. Mabbi además es nuestro amigo desde hace muchos años y compartir escenario con él y con Edu Gracia a la batería y a la guitarra es siempre un gusto. Va a ser un viajazo a través de distintos estilos y moods lleno de sorpresas la verdad. Lo hemos preparado con muchísimo cariño y estamos super ilusionados. ¡La gente va a flipar!
¿Podríamos decir que este será el primero de muchos tours de Blackpanda?
Cien por cien, es una de las partes que más nos gusta de nuestro trabajo. Compartir con la gente que nos escucha es super gratificante. Además, a nivel escénico estamos maquinando muchas cositas para que nuestros conciertos sean cada vez mejores y estén cargados de nuestro sello y nuestra esencia. Que vayas a ver un concierto nuestro y digas, esto es Blackpanda.
¿Además del Fools Tour estáis trabajando en alguna cosilla de la que nos podáis hablar?
Sí, ¡claro! Siempre estamos trabajando en proyectos, pero lo que más ilusión nos hace ahora es el nuevo trabajo audiovisual que vamos a sacar que se llama Nicotina, y es un doble single con Cara A (versión original) y Cara B (versión acústica junto a Unai Karam, compositor y pianista increíble). Viene acompañado de una pieza dirigida y coreografiada por Carlos Ojeda Jiménez, en la que la danza tiene un gran protagonismo, junto a los bailarines Nicolás Martínez y Oriol Lafuente. Es una canción que habla de un círculo vicioso del que no puedes salir, de una adicción descontrolada, de un bucle tóxico… de nuevo una letra muy cruda, con una instrumental frenética y electrónica (con toques de hyperpop, rave o al punk-rock) que recuerda a ese loop infinito al que estás enganchado, pero sin parar de bailar.
Muchísimas gracias por hacernos esta entrevista, hemos disfrutado mucho respondiendo las preguntas. ¡Un abrazo grande!