a_mal_gam_a es el nombre del colectivo formado por el deejay Diskoan y por el director de arte José Salas, de Machines Désirantes Buró. Se unieron a finales de 2016 para dar forma a esta célula creativa, una plataforma de investigación y goce de la música electrónica que se aleja de parámetros convencionales e incide en su vertiente tanto estética como conceptual.
Tanto Diskoan como José Salas tienen una larga relación con la música por separado. En su proyecto musical, Diskoan se declara influenciado por la música negra y la kosmiche music. Sus sets recorren desde el disco más hipnótico al tecno influenciado por el dub, y cuando pincha, según sus propias palabras, Prince se abraza con Daniel Bell y escuchan juntos a Autechre remezclando a Giorgio Moroder. Por su lado José Salas, con su proyecto Josephine's Soundscapes ofrece collages sonoros y sesiones que aúnan ambientes de escape y electricidad, repletas de secuencias aleatorias, oscilaciones meditabundas y voces erráticas de leve intensidad.

Aunando fuerzas, a_mal_gam_a emerge en la escena madrileña para aportar menos de lo mismo a la noche de la capital, revisando el concepto de club. Por ello y pese a su corta existencia, cuentan con Avalovara, un club de escucha mensual y una residencia semanal, Avalovara Selectors, en NuBel –local situado en el edificio Nouvel del Museo Reina Sofía.
¿Cómo surge a_mal_gam_a?
Ambos hemos bailado, codo con codo, desde finales de los 90 en pistas míticas de Madrid. En ellas desarrollamos por separado inquietudes musicales que fueron evolucionando hasta que nos conocimos personalmente y decidimos ir juntos a Unsound en Cracovia. Allí fuimos conscientes de que teníamos que trabajar juntos, no sólo por compartir gustos estéticos, sino por nuestra manera de afrontar los proyectos y la vida en general. Así surge a_mal_gam_a. 
¿Cuáles son sus objetivos?
a_mal_gam_a nace como una plataforma para combinar el disfrute con el riesgo y, sobre todo, romper un poco con la tendencia de infravalorar al público y su capacidad de asimilar contenidos alejados de lo convencional. En la escena electrónica madrileña ha habido mucha propuesta interesante, pero también una excesiva cautela, así que nuestra idea es romper con determinados clichés, tanto estéticos como musicales. Hacemos un trabajo conceptual y de producción importante, pero también cuidamos la forma de comunicarlo e invitamos al asistente a deshacerse de prejuicios.This is a italic
Avalovara, Club de Escucha ha sido vuestro primer proyecto. Con ese nombre tan sugerente y misterioso, ¿en qué consiste?
Nuestro interés era llevar a cabo una fiesta donde poder disponer de ciertos tipos de sesiones, que consumimos en privado o en ciertos festivales, enfocadas más al baile mental o diferentes niveles de escucha. Mediante la combinación de géneros y épocas, trazando a veces sesiones temáticas, con visuales y ambientación cuidadas o aportando maneras diferentes de afrontar una noche de club hemos conseguido materializar nuestro objetivo. Por ejemplo la presentación del libro Océano de Sonido de David Toop (Caja Negra Editora, 2017) en la que participaron diferentes DJs invitados. En abril, junto la editorial de obra gráfica de artistas españoles, La Dominación Mundial, realizaremos una velada en torno al error y lo aleatorio, ejes principales de su última publicación consistente en una carpeta de grabados de los arquitectos Langarita y Navarro.
¿Y la residencia semanal Avalovara Selectors en NuBel?
El concepto musical de Avalovara llamó la atención del equipo de NuBel, que bajo las mismas no-acotaciones musicales nos han programado una residencia semanal. Todos los miércoles, Avalovara Selectors más algún invitado, pone la banda sonora a las cenas, picoteos, cócteles y copas de este espectacular espacio. Los ingredientes son electrónica, ambient, balearic, house y pop en sus vertientes más vanguardistas.
¿De dónde sale el nombre de Avalovara?
Es el título de una novela vanguardista brasileña de Osman Lins de los años 1970, concretamente se publicó en 1975. Veinte años después, el grupo Silvania, en 1995, tituló Avalovara a un single esencial en su carrera. Nosotros rescatamos el nombre en homenaje a ambos.
NuBel fue la sede además de L'Art Danse, las fiestas diarias after ARCO 2017 que organizasteis en febrero, durante la semana del arte contemporáneo de Madrid. ¿Cómo fue la experiencia? 
Una alineación peculiar nos permitió llevar a cabo estas fiestas after ARCO. Recibimos el encargo de NuBel y conseguimos el apoyo oficial de ARCO. Nuestro interés principal era crear un espacio musical y lúdico donde dar cabida al público que asiste a las ferias y eventos durante esa locura de semana. Hicimos una propuesta sencilla en la que cada noche invitamos a un DJ representativo del circuito madrileño, a la que añadimos una esmerada comunicación y diseño, un trabajo de relaciones públicas acorde que sumado a las posibilidades que tiene el espacio: sonido, arquitectura y ubicación, resultaron todo un éxito. Nos sentimos muy realizados al aportar este concepto de fiesta para este tipo de mega cita cultural. Hay muchas fiestas durante estos días, pero en muchas de ellas la música es un mero accesorio sin importancia, a veces incluso algo que te hace sonrojar; como si la música no tuviera cabida en el mundo de las artes.
Dais mucha importancia a vuestra imagen y comunicación.
Sí, es uno de nuestro pilares, algo en lo que creemos profundamente y que creemos que dignifica nuestra propuesta. Somos celosos en los detalles, apurando al máximo nuestras capacidades, en definitiva, haciendo todo lo mejor posible: programación musical, trato al público y por supuesto la comunicación con éste. Nuestro bagaje profesional, nuestro gusto e interés personal tiene un gran componente visual, José por su extensa carrera como director de arte y yo como diseñador y explorador gráfico.
¿Más planes para el futuro?
La acogida de nuestras propuestas nos está propiciando muchas alegrías. Acabamos de estrenar a_mal_gam_a DANCE CAVE, nuestra particular aportación a las pistas de baile madrileñas, y vamos a continuar con periodicidad mensual. La sala Republik nos acogerá de nuevo el sábado 29 de abril y esperamos que salga igual de bien que la primera. Este es el lado más contundente de nuestras propuestas, tal y como lo hemos definido en el nombre, una cueva de baile inmersivo en el que liberarse traduciendo música en movimiento. La idea es programar DJs invitados, pero también apostar por la figura del residente como catalizador principal. Consideramos que la tendencia actual de programar muchos nombres por noche ha ido en contra de la experiencia de baile propiamente dicha, y nosotros queremos entrar a un club, bajar la escalera y bailar desde el primer momento.