Lo del concierto de Interpol del pasado miércoles 15 de febrero en la Sala Capitol de Santiago de Compostela ya pintaba bien, pero cuando SON Estrella Galicia anunció que junto al espectáculo habría una cena y secret show, las expectativas subieron como la espuma de la cerveza. Entre platos acompañados por cervezas de la marca gallega, Valdivia hizo vibrar el Riquela Club con su sonido pop.
A la espera del inicio del secret show, los platos y las cervezas llenaban las mesas de los afortunados que habían conseguido no solo la entrada al concierto, sino también el pack para disfrutar de esta doble experiencia: cena más secret show. Iluminación teñida de rojo y diferentes cervezas para ir acompañando cada plato. Y así fue cómo las mesas se llenaron de la propia Estrella Galicia y 1906 de Reserva Especial, Galician Irish Red Ale y la Black Coupage.
Durante la cena, Valdivia, el grupo liderado por la madrileña Irene López, subió al escenario para ofrecer un show con varias de sus canciones, que van del slow pop al soft pop y neo folk. Y con el subidón hasta arriba, al acabar su actuación, la Sala Capitol abrió sus puertas para recibir al resto del público que venía a ver a Interpol.
Durante la cena, Valdivia, el grupo liderado por la madrileña Irene López, subió al escenario para ofrecer un show con varias de sus canciones, que van del slow pop al soft pop y neo folk. Y con el subidón hasta arriba, al acabar su actuación, la Sala Capitol abrió sus puertas para recibir al resto del público que venía a ver a Interpol.
La sala estaba llena hasta arriba de los afortunados que pudieron hacerse con las entradas del concierto, casi un milagro teniendo en cuenta que se agotaron a los pocos días de estar a la venta. En el ambiente se palpaba la emoción por recibir al grupo neoyorquino que andan de gira por nuestro país presentando su último álbum The Other Side of Make-Believe, y no se hicieron de rogar. Al poco de dar las diez, hora en la que estaba previsto el inicio del show, las guitarras anunciaron que ya estaban sobre el escenario. Y así fue como el vocalista Paul Banks revolucionó la sala entera.
Durante dos horas, el sonido el post-punk acaparó toda la atención del público. La guitarra distorsionada de Daniel Kessler, el bajo definido de Brad Truax, la batería firme y poderosa de Sam Fogarino marcando el ritmo trasladaron al público a los inicios de Interpol. Pensado para su público de siempre, el concierto sirvió como rememoración de los temas más míticos de la banda: fue a sus orígenes con Obstacle 1, sumiendo a la sala en un sonido hipnótico y oscuro tan característico del álbum debut Turn on the bright lights; pasó a través de sus momentos más álgidos en su carrera musical con los sencillos Slow Hands o Evil, que pusieron en pie al público gracias a su ritmo rápido y desenfadado; incorporaron el teclado y ese toque electrónico con Rest My Chemistry; y, finalmente, llegaron hasta su último álbum The Other Side of Make-Believe, tocando canciones como el sencillo melódico Fables o Into the Night.
Aunque el concierto no estuvo a la altura para algunos asistentes, que esperaban un show cargado de movimientos por el escenario y muchas luces y color, los que más disfrutaron fueron los fans que les habían acompañado desde los inicios y que sabían lo que iban a encontrarse sobre el escenario: sus posturas solemnes, un sonido marcado por un ritmo rápido y constante, y sus letras crudas y melancólicas. El espectáculo, más que enseñar sus últimos trabajos o una cara renovada del grupo, sirvió como recuerdo de lo que fueron y una demostración de que esa esencia sigue ahí.
Galicia y la Sala Capitol tuvieron la suerte de ser una de las primeras paradas de la esperada gira de Interpol en España. Los años y el paso del tiempo no importan para esta banda, que sigue arrasando allí donde pone pie, y así lo demuestra el soldout en Barcelona y las pocas entradas disponibles en Madrid y Murcia. ¿Cuál es el secreto para continuar petándolo? Tal vez esté en su solemnidad y en cómo logran poner en pie al público con solo un par de acordes antes de empezar.