Según la lectura médica china y japonesa del rostro, los ojos en Sanpaku son el reflejo de un desequilibrio más allá de lo fisiológico, espiritual o psicológico; se trata de una propensión al caos. Si te fijas en los ojos de John F. Kennedy, Marilyn Monroe o Billie Eilish, verás que en ellos queda visible el espacio blanco por debajo o encima del iris. Según la misma tradición, los ojos en Sanpaku son una advertencia de un pronto final. Sin embargo, todos sabemos que un final es el precursor de un nuevo comienzo, de un nuevo amanecer. En definitiva, el augurio de un nuevo futuro.
Así, la exposición plantea cómo seremos y nos contaremos después de la catástrofe, a través de instalaciones, desarrolladas principalmente en vídeo, de estos artistas de República Checa, España y Bélgica. Y lo narran a través de lenguajes fílmicos, nuevas realidades post-humans, estructuras arquitectónicas utópicas y visualidades post-internet que a lo largo del Espai Tactel Toormix van definiendo el augurio de los ojos en Sanpaku.
Por un lado, Anna Moreno proyecta una ciudad utópica titulada Billennium (2017-18) inspirada en el relato homónimo de J.G Ballards. Muestra una estructura socio-económica heredera del enjambre, en el que la miel pasa a ser Bitcoin y la reina es una Queen Bee que se desplaza a paso de twerking. April showers bring May flowers (2018), de Jakub Jansa y Karolína Juříková, nos acerca a una esperanzada historia de renacimientos y florecimientos. Comisariada por Johanna Caplliure, la exposición estará abierta al público hasta el próximo 13 de marzo.