Uno podría pensar que tal nivel de digitalización irá en detrimento de los puestos de trabajo, pero nada más lejos de la realidad. Si en la antigua tienda en este mismo centro trabajaban 25 personas, ahora lo hacen 80. ¿Y por qué? Pues porque cuenta con más servicios. Por un lado, cuenta con un punto de recogida online, en el que se preparan todos los pedidos que llegan a través de la web para que los clientes puedan recogerlos en tienda sin la necesidad de hacer colas. Por otro, el citado punto de personalización en el que puedes customizar tus prendas in situ con infinidad de bordados y parches, un servicio que antes solo se daba online. Y eso sin olvidarnos de la cafetería donde tomarte un respiro y algún que otro tentempié. El objetivo, crear un entorno agradable donde las compras sean más ágiles gracias a la tecnología, pero donde el trato humano y la cercanía siguen siendo primordiales.