Veintitrés estudiantes del Título Superior en Diseño de Moda y del BA (Hons) in Fashion Design saltan al ring para exhibir el sudor, el sacrificio y el empeño de todo este tiempo. Con una alegría estimulante y bajo la estela de Fashioners of the World comienza el desfile de final de carrera. Pero este año no es un año cualquiera. Por primera vez se otorga el premio especial a la Mejor Colección en honor a Franca Sozzani (1950-2016), editora de Vogue Italia y cómplice del IED Barcelona por su apoyo incesante a la promoción de jóvenes talentos. Por si fuera poco, también se suma al evento la directora de cine Isabel Coixet, encargada de entregar el premio al Mejor Fashion Film, un ejemplo más del papel fundamental que juegan las nuevas tecnologías en el mundo de la moda. Fashioners of the World nace ante la complejidad de un universo globalizado pero repleto de especificidades, virtuosismos y singularidades, una oportunidad para plasmar a través del tejido la contemporaneidad y la pluralidad que construyen hoy en día el mundo creativo. Un mundo que, lejos de perderse en la segregación entre culturas, se comporta como un espejo del siglo XXI. Y así podemos verlo en este desfile que es, cuanto menos, un despliegue de mareas agitadoras e interesantes interpretaciones.
Los alumnos han superado con creces las expectativas y nos han dejado gozar de su libertad creativa. Entre aplausos y agradecimientos han podido demostrar de lo que son capaces, unos resultados que no habrían sido posibles sin el asesoramiento del equipo del IED Barcelona. A saber: Pilar Pasamontes, Directora Científica de Moda del IED Barcelona, Julia Weems, Directora de Moda del IED Barcelona, los diseñadores Juan Salvadó, José Castro, Txell Miras, René Zamudio, Sebastián Pons, y el estilista Jaume Vidiella. Ellos han sido los encargados de acompañar y asesorar el camino a estas promesas y de materializar sus particulares diálogos y universos.
Cae el telón y el jurado ocupa la sala. Sara Maino, directora de Vogue Talents y sobrina de Sozanni, Robert Cavell-Clarke, de Not Just a Label y Philippe Pourhashemi, consultor de moda internacional, son los encargados de picar las campanas. Entre entusiasmo y agitación suenan dos nombres. Demos la enhorabuena a Loreto Martí, ganadora del Premio a la Mejor Colección, a Denise Graus, Premio al mejor Fashion Film. Y mencionemos también a Toni López, porque la suya ha sido la mejor tesis según ha reconocido el equipo docente de la escuela.
Loreto Martí se hace con el reconocimiento a la mejor colección por su universo Amish bautizado como Devil’s dance y convierte el Rumspringa en un conjuto magistral. Ese momento en la vida en el que hay que elegir, escucharse a uno mismo o seguir el instinto que trepa y grita desde las entrañas, ese trance tan particular para la comunidad Amish que convierte a los jóvenes en los dueños de su propio destino. ¿La nueva vida o la comunidad? ¿La ciudad o el refugio? Dos conceptos contrastados se exponen ante la palestra y se transforman en vestidos, prendas y expresiones de una lucha entre el convencionalismo y la modernidad, una auténtica expresión de esta cultura. La provocación gana la batalla y se defiende entre colores llamativos y aullidos que braman la inconformidad ante un mundo lleno de límites. Es por eso que Loreto ha elegido detalles y accesorios que definen todo aquello que la mujer no debe vestir, desde botones, hasta sombreros o pantalones. Un aplauso para ella.