El tradeshow con nombre más suculento del mundo de la moda, empezó su andadura hace ya la friolera de trece años, en la ciudad alemana de Colonia. A partir de 2005 la feria escogió a Barcelona como su sede y punto de referencia aunque, en 2009, volvió a su país de origen aterrizando –nunca mejor dicho– en la maravillosa localización del berlinés aeropuerto de Tempelhof.
Sin embargo, durante la presentación de la actual edición, Karl-Heinz Müller –el fundador de esta cita clave para marcas, compradores y ojeadores de tendencias–, ha anunciado que en 2015 quieren ir más allá y establecer su propio Grand Slam: un tour alrededor de las ciudades que comparten el espíritu Bread & Butter –encarnado en su lema “always the sun”– y que, además de las europeas Barcelona (para la edición de invierno) y Berlín (a principios de verano), también llegará al continente asiático, desembarcando en Seúl en septiembre. Y anuncian que, a falta de una ciudad para completar la gira, ahora su punto de mira está al otro lado del Atlántico.
De momento, ya vamos preparando la vuelta a la dieta a base de pan y mantequilla entre el 8 y 10 de enero, en la Fira de Barcelona.




