Paula Caballero presenta Brava, un proyecto multiplataforma que pretende ser un generador y archivo de contenidos, una mezcla de erotismo y arte, y ha elegido al estudio madrileño Naranjo-Etxeberria para diseñarlo. Paula define a Brava como “un lugar para hablar sobre el cuerpo como un lienzo en blanco de expresiones artísticas contemporáneas. Un lugar de juego que muestra como la desnudez puede actuar de diferentes modos en nuestra sociedad”.
Paula hace tiempo que tenía la idea de crear una revista erótica y enseguida pensó en Naranjo-Etxeberria para que diseñen la identidad gráfica. Les planteó la idea de hacer “una revista erótica intelectual enfocada en el naturismo, sin ser exhibicionista”, un poco para dar salida a la necesidad de analizar un fenómeno sociológico que considera que ha vuelto con mucha fuerza: “Me pregunto, ¿por qué el cuerpo humano es objetivo de tanta atención hoy en día? ¿Por qué las revistas, los medios de comunicación, anuncios están saturados de imágenes de cuerpos desnudos? ¿Tiene que ver la incorporeidad implícita en la era del internet y de la virtualidad en todo esto? ¿O es que sencillamente el cuerpo está de moda?” Y es que claramente estamos viviendo un resurgir de contenidos eróticos que parece ir más allá de un simple entretenimiento. Por ello, decidió que el formato no debería ser un límite, que ya no tenía sentido hacer una revista al uso. Lo que comenzó siendo un proyecto editorial, terminó en una idea mucho más amplia: Brava pretende ser una plataforma - contenedor online donde se archivan proyectos y colaboraciones con la idea de exponer ese contenido en una galería y dar así visibilidad a los artistas , para más tarde crear una pequeña publicación que recopilará todo este material. Desde Brava quiere “liberar al espectador de complejos, ver como estas imágenes recontextualizadas cobran nuevos significados, presentar el cuerpo como objeto, concepto o idea, pero también el cuerpo en su uso cotidiano, la naturalidad de tantos desnudos que van más allá de algo superficial”
A nivel gráfico, Naranjo-Etxeberria planteó una identidad que “mantuviera esa esencia de mostrar el cuerpo al natural a la vez que reforzar la parte intelectual, trabajando con una tipografía más clásica frente a otra más actual para general una identidad atemporal y a través de los colores blanco, negro y amarillo, intentamos reforzar el lado intelectual del proyecto”.
Veremos cómo evoluciona este interesante proyecto y esperamos muy pronto poder anunciar su primera exposición.
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