Más conocido por su trabajo como fotógrafo y por ser co-creador del Fanzine Fuego junto a Elena Gallén, Coke Bartrina desarrolla en paralelo una interesante actividad como carpintero. Se trata principalmente de piezas por encargo, piezas únicas que, surgidas de una manera aparentemente natural, han ido creando un conjunto de muebles de diseño. A través de su blog, Coke nos muestra el proceso y resultados de cada trabajo, además de los momentos cotidianos que van ligados al mismo.
Son muebles hechos de madera, de líneas limpias y sencillas, a veces acompañados de toques de color precisos, que atienden a necesidades muy particulares: una cama más cómoda para leer, muebles especialmente concebidos para albergar plantas, un asiento muy especial... En definitiva: piezas para la vida.
Fotógrafo y carpintero... ¿Qué soñabas ser cuando eras pequeño? ¿Cómo surgen esas dos facetas tuyas?
De pequeño siempre quise ser inventor pero no existe tal carrera universitaria así que acabé estudiando ingeniería. Además, mi padre me enseñó a revelar en casa blanco y negro y de ahí comenzó mi interés por la fotografía. Nunca pensé que pudiese dedicarme a ello, por lo que acabé estudiando esa carrera. Sucedieron varias cosas que hicieron que acabase trabajando como fotógrafo y en un momento dado me pareció que Fuego era la respuesta a muchas preguntas que tenía. Siempre me ha fascinado el mundo DIY y había trabajado la madera anteriormente, la gente comenzó a hacerme encargos y hace cosa de un año monté un pequeño taller para tomármelo más en serio.
Tengo entendido que en esta labor de carpintero eres autodidacta, ¿qué es lo mejor de este tipo de aprendizaje?
Sí, soy autodidacta. Lo mejor es que no cometes los mismos errores dos veces, es un proceso de aprendizaje divertido y gratificante pero a veces muy frustrante. Por lo general uso muchísimo más tiempo pensando y haciendo research que haciendo el mueble en sí. Investigo en blogs, Youtube, libros y otros medios para aprender cuál es la mejor manera de resolver un problema para lo que también me ayuda haber estudiado ingeniería.
Sueles hacer muebles por encargo, ¿en qué medida se involucra el destinatario de esos muebles en su diseño? ¿Es un proceso participativo?
Sí, a parte de producir mis propias piezas hago muebles por encargo. Por lo general tengo al menos dos reuniones con el cliente en cuestión, aunque en ocasiones lo hacemos vía mail. En la primera me explican qué es lo que necesitan exactamente y las dimensiones finales que buscan, y en la segunda les enseño varias referencias que me parecen interesantes y bocetos o maquetas que hago para comprobar que estamos en sintonía. Cuando comienzo el mueble voy enviándoles fotos del proceso para que me vayan dando su opinión.
Has planeado un proyecto en el que invitas a gente de diferentes profesiones para crear una pieza juntos durante varios días, además de documentar con fotos el proceso de construcción y los momentos que lo rodean. Por otra parte, en tu blog solemos verte rodeado de gente, amigos, mientras elaboras tus piezas. Trabajas tanto en tu taller de Collserola, como en sus casas, de manera que parece que se trata de un proceso como muy social. ¿Te sientes cómodo trabajando acompañado o en grupo?
Siempre me ha parecido interesante trabajar con otras personas. Pongo mucha atención al proceso de creación y desarrollo de una pieza, por lo que me gusta la idea de hacer cosas de madera con gente que normalmente no la trabaja pero tiene mucho talento en cualquier otra disciplina. Aunque es complicado, si dos personas consiguen trabajar en sintonía, pueden resultar proyectos muy interesantes a mi parecer.
A pesar de envolverte en proyectos tan interesantes como el mencionado antes, y de que tu trabajo haya aparecido en revistas como The Plant Journal o Apartamento, o de haber participado con tus piezas en exposiciones como Science of the City, en Centre d´Arts Santa Mònica, ¿sigues considerando la carpintería solamente como un hobby?
Soy fotógrafo y de una manera u otra siempre continuaré haciendo fotos. Considero que por una parte es un hobby y por la otra una manera diferente de expresarme. Me queda mucho por aprender y creo que no sería sensato contemplarlo como una profesión por el momento. Como no lo considero un trabajo, puedo tratar la madera de forma muy relajada y a mi ritmo. De todas formas estoy abierto a que esta afición se convierta en algo más con el tiempo.
Tu faceta como fotógrafo se mezcla con estos trabajos en madera, ya que las fotos son tu manera de documentar las piezas y su proceso, el cual podemos seguir en tu blog, constituyendo este una especie de diario. ¿Dirías que la fotografía está presente en todas tus facetas? ¿Es imposible desligarse ella?
Sí, la verdad es que siempre está presente. En cada número de Fuego he colaborado con algún reportaje fotográfico y con la carpintería me pasa lo mismo. Para mí resulta difícil desligarme de ella, es a lo que me dedico y creo que funciona muy bien para explicar los proyectos que llevo a cabo.
He visto que para elaborar piezas como "My Own Little Garden", una especie de mueble para plantas, has utilizado maderas que encontraste en la calle. ¿Fue esto algo deliberado o sucedió de manera casual? ¿Es importante para ti el uso de materiales reciclados?
No especialmente. Es un tanto complicado encontrar buena madera reciclada en Barcelona. De alguna manera, en este proyecto me apetecía hacer el DIY muy accesible al público y creí buena idea usar maderas recicladas que hicieran que el gasto para esta construcción fuese prácticamente cero. La madera en los últimos 15-20 años se ha encarecido muchísimo debido a las nuevas legislaciones y el abuso en la tala de árboles que se hizo en el pasado. Usar maderas recicladas me parece genial pero solo las de buena calidad.
¿Con qué otros materiales, a parte de la madera, te gusta o te gustaría trabajar?
Últimamente me está interesando mucho el metal, me gusta mucho la idea de mezclar diferentes materiales en una misma pieza y metal+madera me parece una idea atractiva. Durante el próximo año me gustaría aprender a soldar, es algo que siempre me ha hecho ilusión. Por otro lado el hormigón siempre me ha parecido interesante en muebles de exterior por el carácter y texturas que adquiere una vez es expuesto a la intemperie.
¿Qué diseñadores o artistas te inspiran?
Me encantan las lámparas de Miquel Milà. La arquitectura de Antoni Bonet i Castellana. Los procesos creativos de Pablo Picasso. En cuanto a muebles e interiores Enzo Mari, Martino Gamper y Piet Hein Eek son algunos referentes.
De las piezas que has realizado hasta el día de hoy, ¿tienes alguna favorita, a la que le tengas especial cariño? Y si es así, ¿por qué?
A todas y cada una de ellas les tengo especial cariño. En todas hay gotas de sudor, sangre y muchas horas. Haciendo la mesa que tengo en mi casa me disloqué la muñeca debido al proceso de dos meses de lijado. Hay una pieza que especialmente tiene sentido para mí, el altillo/litera que le hice a mi amigo Robbie. Entró a vivir en un piso en el que en la habitación no cabía mucho más que un colchón pero tenía el techo muy alto. Creo que su calidad de vida mejoró sustancialmente al tener el doble de espacio y eso para mí hace que la pieza adquiera mucho sentido.
Da la impresión de que tus trabajos surgen de una manera natural, orgánica. Pero ¿tienes alguna meta establecida o ilusión para el futuro? ¿En qué estás trabajando ahora mismo?
En cuanto a fotografía siempre tengo metas, hay medios en los que me gustaría publicar en el futuro e intento seguir algún tipo de estrategia para llegar hasta ellos. La inquietud y curiosidad siempre me empujan a investigar nuevos proyectos pero hasta que no están afianzados no puedo hablar sobre ellos. En cuanto a la madera, la única meta es continuar aprendiendo y disfrutando de ello como hasta ahora. En estos momentos estoy trabajando en unos taburetes que a la vez son pequeños armarios para el velero de un amigo.
