Pero eso no es todo, por primera vez, y debido a las actuales restricciones sanitarias, la organización también amplía su programa de visitas guiadas con un modernísimo recorrido virtual mediante la plataforma Filmin. Un viaje audiovisual por la exhibición que podrás hacer desde casa y que está acompañado por el análisis experto de la fundación Photographic Social Vision.
Como es habitual, la exposición muestra una amplia visión de los retos que afrontó la sociedad global el año pasado mediante las fotografías ganadoras; sin embargo, este edición es singular. Las imágenes, en esta ocasión, también funcionan como un lúcido diagnóstico de los grandes desafíos del mundo en el 2019, justo antes de ser azotado por la pandemia.
Manteniendo la tradición del certamen, los grandes temas retratados en esta edición realizan algún tipo de denuncia, ya sea social, política o medioambiental, y ponen a prueba que la fotografía documental funciona como una herramienta para comprender el mundo. Y es que cada imagen lleva consigo una historia, sucesos reales vividos por individuos, colectivos e, incluso, países enteros. Este año, los bloques temáticos cubren: las protestas ciudadanas a escala global –desde Hong Kong hasta Chile, pasando por varios países africanos–, la crisis climática y medioambiental –como los incendios forestales en Australia y California o las sequías en Sudáfrica–, las diversas expresiones de odio en el mundo –como el ascenso de la ultraderecha a nivel global o la continua crisis de refugiados– y, por último, la desigualdad de género.
El objetivo es claro, acercar al público los temas de actualidad y profundizar en su contexto e, inevitablemente, provocar una serie de emociones en un espectador que viaja a través del tiempo y el espacio mediante cada fotografía y su respectiva historia. El World Press Photo 2020 nos recuerda una vez más que el poder de una imagen, y especialmente, del fotoperiodismo, no tiene límites. Que la instantánea de un segundo en la historia nos puede transportar a un evento específico, a un lugar remoto, al foco de una manifestación o a los secretos de la vida de una persona.
La foto ganadora de este año hace justo eso, nos pone frente a un joven poeta que recita versos de protesta como acto subversivo. Nos encontramos en medio de una manifestación contra la dictadura militar en las calles de Sudán. Capturada por Yasuyoshi Chiba, Straight Voice es una imagen que se diferencia de las ganadoras de años pasados porque no muestra un acto de violencia o sufrimiento, sino que pone el foco en la esperanza y resume, de manera conmovedora, los disturbios en todo el mundo.