Porque Kimberley tiene ese ‘algo’, una mezcla de fortaleza, talento y debilidad por los nuevos retos profesionales, desde que comenzase su carrera en 2011, y empezase a acumular proyectos diversos e interesantes. La joven canaria parece estar dispuesta a lanzarse a la piscina ante cualquier reto, y lo demuestra con su nuevo trabajo, con el que entra de lleno en el mundo de la canción. 135 es el nombre de su primer EP y de su nueva aventura creativa, inspirada en un lugar sorprendente: la cama.
Ese rincón tan onírico y sensual, Kimberley lo convierte en una acertada metáfora musical para mostrar al público un pedacito de su intimidad y transformarla en un motivo perfecto para que podamos bailar hasta el amanecer, e incluso, quizás, caer rendidos en la cama, solos o acompañados, pero con sus melodías instaladas en nuestra cabeza.