Éskaton es una agrupación artística fundada en Madrid en el año 2021. Profesionalmente, se encuentran por primera vez durante la creación de Cicuta contagiosa, estrenada en abril de ese mismo año en Réplika Teatro - Centro Internacional de Creación, Madrid. Y es allí donde los pasados 17, 18 y 19 de marzo han presentado su segunda pieza: Ejercicios militares para confundir éxtasis con agonía. Se trata de la culminación de un proyecto, ideado por los creadores y performers Miguel Deblas y George Marinov, que forma parte de los Sistemas de apoyo a la creación: residencia para artistas de Réplika Teatro y que, además, ha contado con el apoyo de El Consulado (Valencia).
Su actividad principal es estudiar y enfrentarse a los límites últimos del arte y la vida, utilizando las dimensiones y elementos del teatro, con sus obstáculos y potencias, para la expresión de un pensamiento. Y es precisamente este último concepto el que se pone sobre la mesa en su última creación.
La pieza aborda el peligro que supone desmantelar al cuerpo del discurso. Por ejemplo, el peligro que alberga el encuentro sexual entre dos o más cuerpos. Desde el mero desencuentro hasta la violencia más cruenta. En este encuentro, los cuerpos se ofrecen los unos a los otros, permiten ser tocados, penetrados, invadidos, golpeados, lacerados. Las representaciones oficiales del sexo (presentes en la cultura popular y digital) y las herramientas políticas que les rodean (la moral, la educación o la ley) pretenden crear la ilusión de un mundo donde ese peligro desaparece, mediante normas, categorías y contratos. Aquí, sin embargo, la escena constituye un paralelismo con el encuentro sexual, un encuentro cuerpo a cuerpo, donde el peligro actúa como un elemento transformador para configurar un cambio de forma, de figura, una metamorfosis.
El significado ha entrado a formar parte de la crisis con elementos que jamás serán resueltos. Las creaciones de Éskaton pretenden ser el resultado material de un estudio crítico de la historia del arte, la filosofía y la religión, y llevar al extremo las situaciones dentro de la escena y la suspensión de los significados preconfigurados por el espectador a través del tratamiento de los símbolos y los iconos. Además de la convergencia con otras artes, hay algo verdaderamente significativo en el proceso de creación de Miguel y George, y es recolocar lo prioritario de la experiencia escénica más allá de la investigación actoral. Los cuerpos aparecen como un objeto que padece las consecuencias de las otras disciplinas y cuya acción solo puede ser la del sacrificio, la destrucción y la danza.
Según Miguel Deblas, director y dramaturgo de la obra: “Esta propuesta nace para inflamar el conflicto, ardientemente contemporáneo, de lo natural y lo tecnológico de nuestras identidades, y por lo tanto de su mutabilidad. Queremos abrir la posibilidad a fugarnos del destino social, de la categoría o del nacimiento, desfigurando y transfigurando el cuerpo, gracias al artificio, la máquina, la escena”. Hablamos sobre su trabajo, el lenguaje y diversos conceptos en esta interesante entrevista con ellos.