“Hoy limitarse es solo una opción más”, nos dicen, y para Mueveloreina, el dúo formado por Karma Cereza y Joaco J Fox, no es ni tan solo una opción. Cheapqueen les puso en el punto de mira, y ahora, por fin, lanzan su primer LP, Carne, con el que entraremos en calor este invierno.
Sonidos pegajosos –mestizaje de ritmos latinos y electrónicos–, contenidos líricos políticos, punzantes y críticos con los males de la sociedad como el patriarcado. “Mientras unos me llamaban puta, yo estaba teniendo cinco orgasmos” dice Karma, pues para ellos, “el simple hecho de sentirse bien con uno ya es sinónimo de empoderamiento.” Y con su música quieren multiplicar estas emociones. Hablamos con ellos de su nuevo LP, de su característica estética entre kitsch y oscura en la era de la imagen, de sus próximos conciertos, o de la censura, que para ellos es “la madre del fascismo”.
Muchas veces os han encasillado en el género del trap, pero siempre defendéis que no es así. De hecho, ya cuando os entrevistamos la última vez quedaba claro. Vuestra música tiene muchos sonidos diferentes, desde la cumbia al new rave. Cada vez más artistas piensan que delimitar su producción artística a un género solo te limita. ¿Qué pensáis sobre esto?
Las etiquetas sirven cuando se usan para darle a esa etiqueta un significado concreto, y hoy nada es del todo concreto. Estamos viviendo un cambio muy heavy a nivel de cómo consumimos música y cómo la creamos. Por un lado, como oyentes tenemos acceso a un catálogo infinito de canciones y de estilos. Y por otro, como productores tenemos herramientas que permiten crear canciones que pueden sonar como una sinfónica o como una Game Boy. Nunca fuimos tantos frikis haciendo música. Hoy limitarse es solo una opción más.
Hablemos de vuestro nuevo LP, Carne. Lo describís como un conjunto de doce canciones para comer y destacáis que os ha llevado más de un año finalizar este proyecto. ¿Por qué lo habéis decidido titular Carne? También lo definís como un álbum vivencial, ¿qué narrativa siguen las canciones?
¡Tú lo has dicho! Está hecho para comer, estamos hechos para comer y estamos hechos para ser comidos. Solo se podía llamar Carne, Leche, o Hambre. Y nos quedamos con Carne como nombre del disco y Hambre le pusimos al primer single, que resume todo el contenido del álbum. Y descartamos Leche porque Illya Kuryaki and the Valderramas tenían un disco que se llamaba así, obviamente insuperables, y con una portada aún más insuperable.
Hambre, el primer track que estrenasteis, tiene un proceso de creación interesante. Primero enseñasteis una base a Enredo Films (Carmen y Nacho) y luego ellos pensaron una idea e hicieron un guión. Y después, vino vuestro turno para crear la letra. ¿Qué diferencia os ha supuesto este orden de creación que se presenta a la inversa de la norma?
Fue muy divertido. Nosotros primero les contamos de qué iba el disco, el concepto que estábamos trabajando y les enseñamos varias canciones. Ellos realmente nos trajeron una idea brutal que resumía muy bien todo lo que les habíamos contado sobre el disco, por lo que la letra salió de una manera muy natural. Fue un trabajo que salió redondo.
¿Cómo surge esta colaboración con Enredo Films (Carmen y Nacho)?
Valencia es pequeña, a ellos los conocemos desde hace muchos años y sentimos admiración mutua. Un día hubo un par de birras de más y nos vinimos arriba.
Vuestros videoclips son muy llamativos, con una imagen muy cuidada que oscila entre lo kitsch, lo periférico y lo más oscuro también. Y a nivel fotos, lo mismo: hasta el mínimo detalle se mira. ¿Qué tan importante es la parte estética en vuestro proyecto?
A nosotros nos encanta coger la cámara y perdernos. La mayoría de nuestros vídeos los hemos hecho así, y la idea es seguir haciéndolos. Es un proceso creativo que puede ser igual de divertido que hacer música. Es algo que disfrutamos mucho. Las fotos… como no tenemos mucha vergüenza ni complejos nos dejamos llevar por cracks en la materia. Y un día estamos en pelotas cubiertos de purpurina y al otro nos hacen un shibari colgados boca abajo atados con una cuerda a un palo. Para el disco planteamos la estética de carnicería junto con Enric Alepuz, y de ahí empezamos a dibujar la estética, ideas y gamas de la sesión de fotos junto con Palma Llopis y Nacho Ramon y Alvaro Peñalta –que juntos son Los Super Fuertes (para nosotros los Super Nenes)–, quienes idearon los sets más característicos y quienes los construyeron… ¡una animalá!
Si a todo esto le sumas la propuesta de maquillaje y peluquería de Gala y Andrea –de KukiGimenez– o la propuesta de vestuario de Adrián y Elena –utilizando el plástico como elemento de moda y no como desecho–, o el espacio de Llumm, con la iluminación que planteó Alberto Gutiérrez… Con ese nivel de implicación y ganas de hacer algo profesional sin una marca detrás o nadie que pusiera dinero más que del que disponíamos nosotros como Mueveloreina. Yo qué sé, la verdad es que estamos super contentos y orgullosos de toda la imagen que ha quedado. Solo hay que verlo en conjunto. Al final, estamos en la era de la imagen, la estética tiene una importancia acojonante. Y nos gusta trabajarla porque nos encanta cuando lo vemos en otros proyectos. Nos gustan las cosas mimadas, cuidadas y curradas. Hoy, la música es un producto audiovisual.
Si a todo esto le sumas la propuesta de maquillaje y peluquería de Gala y Andrea –de KukiGimenez– o la propuesta de vestuario de Adrián y Elena –utilizando el plástico como elemento de moda y no como desecho–, o el espacio de Llumm, con la iluminación que planteó Alberto Gutiérrez… Con ese nivel de implicación y ganas de hacer algo profesional sin una marca detrás o nadie que pusiera dinero más que del que disponíamos nosotros como Mueveloreina. Yo qué sé, la verdad es que estamos super contentos y orgullosos de toda la imagen que ha quedado. Solo hay que verlo en conjunto. Al final, estamos en la era de la imagen, la estética tiene una importancia acojonante. Y nos gusta trabajarla porque nos encanta cuando lo vemos en otros proyectos. Nos gustan las cosas mimadas, cuidadas y curradas. Hoy, la música es un producto audiovisual.
Otros temas de vuestro álbum como Humo o Napalm tienen una letra que habla sin tapujos de temas de actualidad o de la sexualidad. ‘Estoy ardiendo Notre Dame’, de Humo o ‘Sigo metiéndolos en mi coño’, de Napalm. Sin embargo, hoy día vivimos un momento en que se censuran letras, palabrotas, etc. ¿Cuál es vuestra opinión? ¿Cómo creéis que se podría proteger la libertad de expresión del artista?
La libertad de expresión en general no debería tener censuras. Prohibir o condenar un discurso solo lleva a meterlo debajo de una alfombra. Para proteger la libertad de expresión básicamente no hay que hacer nada. De lo que hay que protegerse es de los discursos violentos, irracionales o sentimentalistas, y para ello el mejor remedio es rebatir este tipo de discurso con lógica, racionalidad y más educación. En la escuela no nos enseñan a pensar. Y creo que tenemos que volver a aprender a encajar las palabras con argumentos y no pataletas. La censura es la madre del fascismo.
En muchos temas aparecen conceptos relacionados con la sexualidad, sobre todo la femenina. ¿Queréis empoderar a las mujeres con su propia sexualidad? ¿Pueden vuestras letras ayudar a poner en diálogo este tema?
Karma: Mi sexualidad es algo que siempre he llevado muy al límite, desde mi adolescencia. Siempre la he vivido con plenitud y con absoluta naturalidad y orgullo. Ya lo escribí una vez: mientras unos me llamaban ‘puta’, yo estaba teniendo cinco orgasmos. Yo que sé. Aquí, ¿quién pierde? ¿La persona que menosprecia o insulta por frustración propia, o la que vive y siente sin importarle una mierda lo que digan otros? Hoy me encanta ver satisfayers por todas las stories de mi insta <3
Queremos que la gente disfrute de nuestras canciones, que las haga suyas. Que les ayuden a sentir, a bailar y a divertirse con su sexualidad y con todo lo demás. El simple hecho de sentirse bien con uno ya es sinónimo de empoderamiento. Al final, la música es un multiplicador de emociones.
Queremos que la gente disfrute de nuestras canciones, que las haga suyas. Que les ayuden a sentir, a bailar y a divertirse con su sexualidad y con todo lo demás. El simple hecho de sentirse bien con uno ya es sinónimo de empoderamiento. Al final, la música es un multiplicador de emociones.
Otros de vuestros temas, como Tiburona, tienen ritmos más latinos. Vuestra música tiene un componente festivo, pero además letras con una crítica sobre varios temas sociales. Muchas veces estas dos facetas están reñidas para muchas personas. ¿Qué opináis sobre esto?
Que seguramente se estén perdiendo mucha buena música.
¿Ahora mismo, cuáles son esas canciones que no podéis parar de escuchar en loop?
En la jaula, de El Bobo Negro; Mandolin, de Gustavo Pena, y El rato, de Mi Amargo. ¡Ah! Y Llorando en Spook.
En vuestros conciertos os vemos pasándolo bien, bailando, interactuando con el público. ¿Cómo os preparáis para un live? ¿Algún ritual o algo similar?
Si no hay vermut no hay bolo.
Este noviembre vais a estar en algunos escenarios de España, entre ellos el 9 en Valencia, el 16 en Castellón, el 28 en Barcelona y el 30 en Madrid.¿Cuáles son vuestros planes de futuro?
A corto plazo, la idea es hacer algunos videoclips más del disco, escuchar mucha música (algo que cuesta mucho cuando estás metido todo el día en el estudio) y empezar a planear cuál será el próximo plan. Eso sí, vienen una serie de bolos antes de acabar el año. Estaremos en Valencia, Castellón, Barcelona y Madrid.
