Tras años conociéndose y flirteando con la idea de hacer algo juntas, Blanca Miró y María de la Orden al fin lo han hecho. Su nuevo proyecto se llama La Veste, y es una marca donde las blazers y americanas son protagonistas. Pero no esperes uniformes aburridos y corporativos. La elegancia de María equilibra la locura de Blanca, y el resultado son unas prendas de inspiración vintage con estampados y cortes llamativos, con mucha personalidad, y que hablan por sí solas. Como sus propias creadoras.
Blanca, María, ¿cómo os conocisteis y cuándo supisteis que seríais un buen tándem de trabajo?
Nos conocimos hace seis años en Barcelona y congeniamos. De ahí surgió una amistad que se ha desarrollado con el tiempo de forma natural (las visitas de Blanca a París, los encuentros en Madrid o Barcelona aprovechando cualquier circunstancia, etc.). Y ahora, un proyecto profesional conjunto. Creo que lo supimos desde el primer momento. La verdad es que siempre estábamos hablando de hacer algo juntas, y fue el año pasado, durante la Semana de la Moda en París, cuando se nos ocurrió crear una marca de chaquetas.
Blanca, anteriormente ya has trabajado en diseño de moda para una gran marca, pero la idea de crear tu propia línea siempre te había rondado por la cabeza. Y ahora se ha hecho realidad junto a María de la Orden. ¿Por qué ahora y por qué con ella?
Como yo digo, primero hay que trabajar para alguna marca y luego para la tuya. Una marca no es solo diseñar y crear, también es saber cómo funciona todo el background, que no es nada fácil. Ahora mismo sigo diseñando joyas con Wilhelmina Garcia, pero entiendo el agobio de los diseñadores que tienen su propia marca, ya que conlleva un millón de cosas que tienen que estar todas correctas para que pueda funcionar. Es bonito tener tu empresa, tu nombre y tu historia; por eso decidí juntarme con María y lanzar La Veste.
Nosotras nos conocimos hace aproximadamente seis o siete años y, a pesar de ser muy diferentes, tenemos algo que se complementa a la perfección. Además, a la hora de diseñar y pensar en nuevas piezas, ella pone su elegancia y yo pongo mi locura; un buen mix.
Nosotras nos conocimos hace aproximadamente seis o siete años y, a pesar de ser muy diferentes, tenemos algo que se complementa a la perfección. Además, a la hora de diseñar y pensar en nuevas piezas, ella pone su elegancia y yo pongo mi locura; un buen mix.
¿Cómo es trabajar la una con la otra? ¿Qué beneficios encontráis al trabajar conjuntamente, y cómo os complementáis?
Es muy agradable y cómodo. Resulta muy grato y satisfactorio, ya que nos complementamos perfectamente. Hasta ahora, ambas compartimos todo el proceso creativo y de producción, desde el diseño hasta los acabados de las prendas, incluida la elección de telas, botones o la imagen de la marca. Después, Blanca está más centrada en la comunicación y María en la comercialización de la marca. Pero, en cualquier caso, todo lo decidimos las dos, y eso supone un valor añadido que se manifiesta en el resultado final.
¿Qué tres palabras definen la identidad de La Veste?
Divertida, auténtica y retro.
‘Veste’ significa chaqueta o americana en francés. Y es una prenda protagonista en vuestras colecciones y looks. ¿Qué significa para vosotras y por qué decidís llamar vuestra marca con relación a ella?
El nombre representa lo que hacemos y, en singular, lo que pretendemos ofrecer a nuestras clientes: su chaqueta, esa que es especial y favorita, esa que refuerza su identidad. Para nosotras, la chaqueta resulta una prenda clave en cualquiera de nuestros looks diarios, ya sea durante el día o para salir por la noche.
¿Qué tiene para cada una de vosotras una chaqueta perfecta? Describídnosla.
María: Lo que tiene una buena chaqueta es el poder de convertirse en la imagen de tu estilismo, sea el que sea. No me gusta hablar de chaquetas –o de cualquier otra cosa– perfectas, aunque las que hacemos nosotras se acercan bastante (risas). A mí, en este momento y con carácter general, me gustan aquellas que marcan la cintura; pero también una cortita cruzada o una con mangas diferentes.
Blanca: Para mí, una chaqueta/blazer perfecta es una prenda que habla por sí sola. Es decir, que llevándola puedas transmitir como tú eres. Lo bueno de La Veste es que la gente ha entendido y se siente identificada con nuestro pensamiento. Es una pieza que solo llevan mujeres auténticas.
Blanca: Para mí, una chaqueta/blazer perfecta es una prenda que habla por sí sola. Es decir, que llevándola puedas transmitir como tú eres. Lo bueno de La Veste es que la gente ha entendido y se siente identificada con nuestro pensamiento. Es una pieza que solo llevan mujeres auténticas.
Hasta ahora, se pensaba en el ‘power dressing’ femenino a partir de prendas o ropa tradicionalmente masculina adaptada al armario de ellas – pantalones, trajes de chaqueta, mocasines con tacones/plataforma, etc. Sin embargo, una mujer empoderada no debería ser aquella que viste de hombre pero más estilizada. ¿Cómo reinventáis la americana, eso ‘tan masculino’, en algo más ‘femenino’?
Es verdad que antes, las blazers solo las llevaban los hombres, pero eso ya nos queda muy lejos. Aún así, también tienes razón que lo llevamos ahí dentro, seguimos pensando que es una prenda masculina. Nosotras hemos querido cogerla y darle totalmente la vuelta mezclando colores y estampados. De ahí vienen las mezclas ‘locas’ que le dan la originalidad a la marca. De momento hemos hecho cuatro patrones distintos. El primero que hicimos es recto, oversized y un pelín más larga; es más masculina. Las otras tres son más femeninas ya que son más entalladas –por ejemplo, una tiene mangas ‘jamón’.
En la web afirmáis que la mayor inspiración detrás de La Veste es la “estética vintage, que se refleja en la combinación libre y armoniosa de colores (rosa, amarillo, verde, etc.), de estampados (cuadros, rayas, etc.), y texturas (algodón, terciopelo, lana, etc.)”. ¿Qué tienen las décadas pasadas que os inspiren a crear ropa para la mujer de hoy?
Probablemente, de forma paradójica, una mayor libertad a la hora de crear, lo que se traduce en formas más atrevidas, más despreocupadas y alegres, incluso más descaradamente desvergonzadas, algunas de las cuales han llegado a convertirse –cada una en su estilo– en ‘clásicas’. Es por tanto esa estética vintage con vocación de clásica la que ha inspirado el proceso creativo de La Veste.
Algunas piezas vintage son como tesoros. Contadnos cuál es vuestra prenda o complemento favorito, o a la que tenéis más cariño por algún motivo en especial.
Blanca: tengo varias blazers que colecciono de viajes que voy haciendo y son las que me sirven de inspiración, pero también tengo un Kelly de Hermès marrón chocolate que es mi mayor tesoro. Es muy antiguo pero lo guardo bajo llave.
Uno de vuestros propósitos iniciales fue producir en España, y lo hacéis en un taller de Galicia especializado en la confección de chaquetas. Por otro lado, no tuvisteis ninguna duda desde el principio en realizarlas de manera responsable y sostenible. Toda una declaración de intenciones. Como marca joven, ¿creéis que es ‘obligatorio’ seguir una ética de trabajo, producción, y distribución respetuosa con el medio ambiente?
Creemos que ya no cabe otra opción porque no queda más margen de maniobra. Y nos alegramos de comprobar que cada vez hay más gente –jóvenes y menos jóvenes– que ha tomado conciencia de la necesidad de seguir un modelo de desarrollo sostenible, que garantice el equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado del medio ambiente y el bienestar social.
Si las empresas están cambiando y se están volviendo más responsables, significa que también lo están haciendo los consumidores. Parece que la ropa de usar y tirar sigue en declive, lo cual es bueno para el planeta y para nuestros armarios. ¿Cómo valoráis este cambio de mentalidad y cómo esperáis contribuir a ello en las próximas temporadas?
Nosotras creemos y somos partidarias de comprar menos y más bueno, es decir, todo lo que compras extremadamente barato significa que ha estado fabricado seguramente por gente explotada y, además, la calidad no es buena. A mí me gusta reutilizar y guardar todas aquellas prendas o accesorios buenos que sé que, aunque pasen los años, seguirán teniendo un valor. Es por eso que cuando decidimos crear La Veste, desde el primer momento quisimos producir en una empresa pequeña familiar y no producir grandes cantidades. No nos sale barato pero preferimos ayudar al planeta en general. Muchas de nuestras telas son toldos reciclados o tapices, cosa que también hace que sean más especiales.
Para ir terminando, ¿qué viene ahora? ¿Qué le depara el futuro próximo a La Veste?
La imaginación y la creatividad son señas de identidad de La Veste, así que en nuestra cabeza está incorporar muchas otras cosas. Pero queremos ir paso a paso, no tenemos –ni queremos tener– prisa. Probablemente, lo próximo, después de nuestros pantalones y gorros, serán unos bolsitos con los mismos prints de las chaquetas.