Fundador del sello Fayer y DJ de éxito internacional, el incombustible Edu Imbernon no para. Tras sorprendernos hace unos meses con el tema Underworld junto con Duologue, el valenciano sigue pavimentando su camino hacia la consolidación como uno de los agentes de la música electrónica más destacables de este país. Hablamos con este polifacético artista sobre inspiración, tecnología, y su nuevo proyecto: abrir un restaurante en Valencia. Además, este domingo estará pinchando en la fiesta Brunch In The Park en Barcelona, así que si estás por la ciudad, no te pierdas su set mientras se pone el sol.
La música electrónica es libertad pura en experimentación musical. ¿De qué forma has trabajado para definir el sonido de tu nuevo single / EP? ¿Cómo fue el punto de partida en comparación al resultado final?
Underworld era un tema ya editado por Duologue que descubrí cuando trabajé con su vocalista, Tim Digby-Bell, en mi anterior single Bitter Fate. Hablé con él para re-editarlo haciéndolo en versión 4x4 y el resultado fue especial.
Y, ¿qué aporta el uso de la voz, como recurso musical, a tus temas?
Creo que la voz, siempre y cuando sea excelente, es un plus más para cualquier canción. Es un elemento fácil de recordar para el público y bonito a la hora de trabajarlo.
Parte de la creación musical de un DJ proviene de la consecución de remezclas de temas no originales, ¿por qué haces remezclas? ¿qué te aportan o, mejor dicho, qué les aportas tú?
Para mí el concepto de remezcla se ha ido definiendo durante los últimos años. El haber remezclado en 2010 Crystallised de The XX cambió mi concepto y me hizo ser mucho más exigente con los trabajos que remezclo. Solo lo hago cuando me enamora el tema original. Suelo respetar bastante la pieza e intento darle mi toque personal, el cual creo que se puede diferenciar en casi todos mis temas.
Has trabajado en la remezcla de canciones de grupos como los ingleses The XX, Metronomy, Maya Jane Coles, WhoMadeWho o Tiga. ¿Dónde está la esencia del buen resultado de una reinterpretación musical en la manera completamente única de Edu?
Melodía, groove, intensidad, sentimiento. Esta es la esencia que suelo aplicar a cualquier trabajo.
No es el mismo proceso de creación cuando se parte desde cero en una canción que cuando se trata de re-imaginar desde otro punto de vista musical un tema previo, ¿cuál es el proceso creativo y de producción que sigues en cada caso?
Cuando se trata de un original cambia, ya que la idea inicial sale completamente de ti. Por lo general mi proceso creativo se basa primero en crear un groove muy sencillo y, a partir de ahí, suelo grabar alguna secuencia o arpegio que me sirva de ‘cama’ de fondo o que me marque la nota. A continuación suelo grabar acordes y seguidamente el bajo junto al resto del groove. Suele ser lo mismo para los remixes, únicamente que ya suelo empezar con ese elemento de fondo que me marca la nota o ritmo a seguir.
La música electrónica conjuga los elementos musicales más básicos como la armonía, el ritmo o el tempo con el panorama tecnológico más avanzado. ¿Qué influencia tiene la tecnología en tus creaciones musicales? ¿Qué tecnología eliminarías de la música electrónica?
Sin duda la tecnología es algo esencial en mi música. Hay infinidad de herramientas y plug-ins que me permiten desarrollar tareas creativas que jamás se me hubieran pasado por la cabeza. No eliminaría ninguna tecnología de la música electrónica. Creo que está genial que exista en abundancia y que cada uno elija en qué grado quiere utilizarla.
La creación de nuevos sonidos y melodías es única en cada persona, así como su interpretación. ¿Qué te inspira el comenzar a componer un nuevo tema y llevarlo a una producción musical?
Siempre digo que me tiene que hacer ‘volar’. Es difícil de explicar pero, en cuanto tengo esa sensación en el cuerpo, sé que he encontrado lo que buscaba.
Asumir riesgos es algo intrínseco en la evolución profesional y personal. ¿Qué riesgos y retos tanto creativos como sonoros has incrustado en tus creaciones?
Fusionar elementos acústicos y alejados de la escena más house / techno (guitarras, bajos, violines, etc.) a mis producciones.
¿Cómo es el equipo humano que acompaña a Edu Imbernon en cada paso en la industria musical? ¿Ha crecido en los últimos años?
Sí, estamos en constante crecimiento. Una cosa que destacaría sobre cada uno de ellos es que son los mejores en lo que hacen. Eso hace que todo funcione como un engranaje.
Estás constantemente de gira mundial, ¿cómo estás viviendo la experiencia de compartir tu música en otros países? ¿Cómo reacciona la gente de cada país a tu puesta en escena? ¿Aprovechas para jugar a ser turista?
Llevo muchos años haciéndolo, es una experiencia incomparable, la verdad. Últimamente me apetece más estar en el estudio que de viaje pero también va por épocas. Aprovecho para ser turista siempre y cuando sea un destino que me motive; hay ciertos sitios en los que no apetece mucho salir del hotel.
¿Qué hay de Valencia en la versión de Edu como DJ?
Es mi casa, mi ciudad. Desde que lancé el proyecto de Fayer hace unos años he visto una bonita evolución en mi relación con la ciudad, la gente me quiere y el sentimiento es recíproco.
Hablando de Valencia, sabemos que tienes pensado inaugurar un restaurante allí. ¿Por qué has decidido dar este salto dramático de la música a la cocina? ¿De qué te encargarás exactamente en el restaurante? Cuéntanos un poco más de qué va el proyecto.
Mi gran pasión junto a la música es la cocina. Si no me dedicara a la música estoy seguro de que estaría involucrado en cocina. Para mí guardan una similitud creativa bastante grande.
Creo que ambos proyectos se pueden llevar a la vez sin problema –de hecho, el restaurante se va a llamar Fayer Bar. Así que evento, sello y restaurante se retroalimentarán el uno al otro.
Yo me encargo de la parte artística –carta sobre todo, que ha sido elaborada basada en mis experiencias culinarias por todo el mundo. Va a tener un poco de cada continente que he visitado con un toque personal. ¡Tengo muchas ganas de que empiece esta nueva aventura!
Creo que ambos proyectos se pueden llevar a la vez sin problema –de hecho, el restaurante se va a llamar Fayer Bar. Así que evento, sello y restaurante se retroalimentarán el uno al otro.
Yo me encargo de la parte artística –carta sobre todo, que ha sido elaborada basada en mis experiencias culinarias por todo el mundo. Va a tener un poco de cada continente que he visitado con un toque personal. ¡Tengo muchas ganas de que empiece esta nueva aventura!
Para terminar, ¿cuál ha sido la playlist que ha coronado tu verano 2017?
Si tuviera que decir tres canciones:
Edu Imbernon & Droog – Lucent: saldrá ahora en septiembre en Culprit, sello de Los Angeles) y para mí es uno de los mejores discos que he hecho.
Denis Horvat – Lodi: uno de mis temas favoritos.
Depeche Mode - Where’s The Revolution (Patrice Baumel remix): una de mis bandas favoritas remezcladas por uno de mis productores favoritos.
Edu Imbernon & Droog – Lucent: saldrá ahora en septiembre en Culprit, sello de Los Angeles) y para mí es uno de los mejores discos que he hecho.
Denis Horvat – Lodi: uno de mis temas favoritos.
Depeche Mode - Where’s The Revolution (Patrice Baumel remix): una de mis bandas favoritas remezcladas por uno de mis productores favoritos.
Edu Imbernon pinchará este domingo 3 de septiembre de 20:00h a 22:00h en Brunch In The Park, Jardins Joan Brossa (Montjuïc), Barcelona.