El viaje a París para la final femenina de breaking en los Juegos Olímpicos 2024 con Nike ha sido una experiencia completa: deporte, diversión y conocer de primera mano la evolución tecnológica que está implementando la marca. Desde el escenario olímpico en la icónica Plaza de la Concordia nos fuimos al Museo Pompidou para visitar la exposición Art of Victory, que celebra la historia y el impacto de Nike en el diseño moderno. Ahora que estamos en plenos Juegos Paralímpicos es el mejor momento para recordar este viaje.
Llegamos a París para asistir a la final femenina de breaking. ¿En qué consiste la competición? Las dieciséis mejores B-Girls del planeta se enfrentan en batallas 1v1. Las atletas utilizan una combinación de movimientos de fuerza, incluidos los windmills, el 6-step y freeze, mientras adaptan sus movimientos e improvisan al ritmo de la música que pone un DJ en directo, en un intento por conseguir los votos de los jueces y llevarse a casa las medallas olímpicas. En cada uno de estos asaltos, un número impar de jueces (por si hay empate) califican según cinco categorías específicas: vocabulario (variación, cantidad de movimientos), técnica, ejecución, originalidad y musicalidad. Ahora que sabemos un poco más, vamos a los resultados de esta final. La japonesa AMI se hacía con la medalla de oro, dejando boquiabiertos a todos los asistentes, aunque ahí también está Nicka, de Lituania, una bomba de energía que parecía que iba a ser la gran triunfadora de la noche pero es suya la medalla de plata, mientras que la atleta china 671 (curiosidad, así se pronuncia su nombre en chino), completa el podio con una potentísima actuación que le vale el bronce. Pero el orden al final da lo mismo, las tres pusieron el listón por las nubes y ya da igual quién gane, el estadio vitoreaba sus nombres por igual y se venía abajo con cada movimiento. Además demuestran que la polémica inclusión del breaking como deporte olímpico da una dimensión nueva y fresca, aunque se rumorea que esta disciplina no volverá en la próxima edición de Los Ángeles, pero que les quiten lo bailao, nunca mejor dicho. No podemos dejar de nombrar a la australiana Raygun con su ritual del canguro, que aunque no le sumó ni un punto en las batallas, se convirtió en unos de los momentos más virales de los Juegos, aunque más por su peculiaridad que por méritos deportivos, y dejando unas risas a nivel global.
Pero no todo es competencia. Nike nos llevó al Museo Pompidou para una visita exclusiva, donde la exposición Art of Victory nos sumergió en la historia de la marca y su legado en el mundo del deporte. Desde un recorrido visual de las icónicas Air Max, hasta el innovador proyecto A.I.R, que une a atletas y diseñadores para crear el futuro del calzado deportivo, la exposición es un viaje por el pasado, presente y futuro de Nike.
Y por nombrar algunas de sus novedades más destacadas, están las nuevas Nike Jam, las primeras zapatillas hechas para el breaking, y su nueva línea de tecnología portátil en colaboración con Hyperice. Estos productos no solo están diseñados para mejorar el rendimiento y la recuperación, sino que también reflejan la constante evolución de Nike en el mundo del deporte. Este viaje no es solo una celebración del breaking, sino también una muestra del compromiso inquebrantable de Nike con la innovación y el deporte.