La Amazonia es un ecosistema virgen que abraza una grandiosa biodiversidad y algunas de las comunidades humanas menos contaminadas por la civilización. La exposición de Sebastião Salgado, diseñada y comisariada por Lélia Wanick Salgado y con la creación musical de Jean-Michel Jarre, recoge más de doscientas fotografías en blanco y negro que muestran su naturaleza y su hábitat y se podrá visitar hasta el 20 de abril de 2025 en las Drassanes Reials de Barcelona.
Detrás de la belleza de las imágenes, que por sí mismas son dignas de ver, el objetivo de la exposición es mucho más profundo. Es un acto reivindicativo, es una muestra para ganar consciencia sobre la importancia de mantener vivo y sano el paraíso y uno de los pulmones vitales del planeta. La exposición no nace de un viaje sin más, sino que surge de un trabajo de nueve años para mostrar con todo detalle qué encontramos en esta región tan desconocida para tanta gente.
“Hemos tomado la decisión de presentar la Amazonia viva”; así lo dice Sebastião Salgado. Hay una amazona muerta que no está representada, dado que se ha perdido más del diecisiete por ciento del territorio por culpa de la sociedad de consumo. El fotógrafo ha recurrido a la fotografía aérea para captar la inmensidad de la selva, sus ríos voladores y lluvias torrenciales. También caminó durante días para documentar la vida y la cultura de los pueblos indígenas de la mano de capitanes de la selva.
La exposición plantea ser una experiencia multisensorial, pues la creación musical de Jean-Michel Jarre, compositor francés de música electrónica, es excelente. Los sonidos naturales se encontraban registrados por el Museo de Etnografía de Ginebra. Estar paseando por los pasillos repletos de imágenes sumamente potentes con un sonido que encaja a la perfección con lo visual empuja a convencerte de que estás allí, que eres tú quien está gozando esa belleza en primera persona.
Además de su atractivo estético, Amazônia es igualmente un llamado de atención. Salgado no pretende exhibir la destrucción directa, sino resaltar la magnificencia de este entorno como una señal de lo que se está arriesgando. Su trabajo nos invita a ver la Amazonia como el laboratorio natural más extenso del planeta, un área que contiene una décima parte de las especies de plantas y animales del mundo y que es fundamental en la batalla contra el cambio climático. “No he tenido la oportunidad de ver la exposición del CCCB, pero seguro son complementarias”. Cabe destacar que en Barcelona se encuentran dos exposiciones que tratan sobre la Amazona y cada una aporta perspectivas distintas y vale la pena visitarlas para tener una visión general del territorio.
La muestra incluye herramientas para que la fotografía sea accesible a todos los asistentes, como Amazônia Touch. Es un proyecto que proporciona veintiuna planchas táctiles para explorar ciertas imágenes a través del sentido del tacto. Asimismo, gracias a la realidad aumentada (AR), cada imagen tendrá una descripción en audio y texto.