Mucha realidad, mucho color y mucha trayectoria. Hoy hablamos con el artista madrileño Alex de Marcos, también conocido bajo el pseudónimo Mundopiruuu. De Marcos se atreve con paletas muy variadas, con técnicas que defieren mucho entre sí, es un fiel amante de la pintura al óleo. Sus obras son llamativas y detalladas, pero esconden mucho más de lo que nuestros ojos perciben. Todas las mujeres que pinta, todos sus referentes del pasado y, sobre todo, su polifacética carrera artística, que ha pasado por el graffiti, por el rap, incluso por la literatura, justifican que a día de hoy sea uno de los artistas visuales españoles más destacados en Instagram, que utiliza a modo de galería abierta.
¿En qué momento la ilustración toma un papel principal en tu vida?
En el momento vital que llaman hacerse mayor. Llevaba trabajando desde los 17 años en lo que salía y en mi tiempo libre pintaba graffiti de manera ilegal. Llegó un momento en el que el tipo de vida que llevaba no sentía que fuese sostenible a largo plazo y cambié los botes por una tableta Wacom.
Te defines como colorista, mezclas la figura humana con la arquitectura. Cuéntanos cómo describirías tu perfil como artista.
Sí, actualmente podría definirse así, pero es solo una etapa. Igual que lo fue la ilustración infantil, fruto de aquella investigación publiqué álbumes ilustrados como Bolita de Nube o el estilo más cercano al cómic que usé en Hipster de extrarradio. No me caso con ningún estilo, según la etapa vital en la que me encuentre, así será mi registro.
Sin duda, lo que más me llama la atención de tus creaciones es el uso atrevido del color. ¿Siempre has sido tan osado en este aspecto?
Sí, siempre me ha gustado mucho. Ahora lo empleo con mayor conocimiento, estudiar a los impresionistas me ha hecho entender realmente el color. El color es la melodía de la obra.
Actrices, modelos, cantantes... ¿Cuál es el motivo por el que las mujeres protagonicen la mayoría de tus obras?
Siempre son mujeres porque desde que tengo uso de razón me han causado fascinación en todos los sentidos. Son artistas que dan mucho de ellas mismas, ya sea en una canción o una película. Yo recojo todo lo que ofrecen y con eso hago la obra.
Alguna vez has comentado que, a tu parecer, se suele retratar a las mujeres de una forma demasiado delicada. ¿Cómo abordas tus obras para romper con esa idea y mostrar el cuerpo femenino sin florituras?
Sí, dentro de la ilustración todo era delicado y quebradizo. No entiendo por qué se popularizó esa tendencia, a mí personalmente no me gusta. Tampoco digo que haya que trabajar la matería para pintar un cuerpo de manera cruda tipo Lucian Freud o Jenny Saville, ambos me fascinan. Lucian, por ejemplo, utilizaba polvo de mármol para conseguir esas texturas y dentro de la ilustración entiendo que no es fácil trabajar así. A mí me interesa representar mujeres de esta época. Con camisetas de grupos de música, ropa actual… ¡Ah! Y en muchas cosas con perros y helados que son lo mejor de la vida.
Es cierto que puede parecer que pinto a mis "crushes", pero la época de llamar la atención causando desagrado ya la pasé con el graffiti. A nadie le gustaba el estilo neoyorkino que hacía por aquella época. Antes rechazaba todo lo "preciosista" ahora no. Yo creía que era irreverente y rupturista, pero en realidad era un adolescente enfurecido que rechaza a grandes maestros cómo Sorolla, al que, por cierto, ahora admiro profundamente.
Es cierto que puede parecer que pinto a mis "crushes", pero la época de llamar la atención causando desagrado ya la pasé con el graffiti. A nadie le gustaba el estilo neoyorkino que hacía por aquella época. Antes rechazaba todo lo "preciosista" ahora no. Yo creía que era irreverente y rupturista, pero en realidad era un adolescente enfurecido que rechaza a grandes maestros cómo Sorolla, al que, por cierto, ahora admiro profundamente.
Anna Castillo, Aitana Ocaña y Anya Taylor-Joy son algunas de tus musas. ¿Has recibido nunca alguna respuesta o reacción por parte de estas mujeres mundialmente conocidas que pintas?
De algunas no, de otras sí. Con Aitana hemos quedado para pintar juntos en mi casa, es encantadora.
La verdad es que no busco aprobación en esas figuras. Hay un paralelismo con mi manera de entender la música. Yo me crié escuchando y haciendo rap, para producir un beat sobre el que rapear buscábamos inspiración en otros discos, robábamos trozos de canciones, hacíamos un loop y añadíamos un bombo y una caja y se hacía alquimia. Así nació el rap. Me di cuenta de esto viendo las colecciones de Virgil Abloh, en paz descanse. Él cogía cosas de la calle como carteles o señales o de museos, incluso intervenía sudaderas Champion. Virgil ha cogido porciones ropa y con eso ha hecho moda. Tengo una camiseta suya para Louis Vuitton que está por fuera todo lo que normalmente no se ve, las costuras, las etiquetas… Cuando lo vi, enseguida me vino a la cabeza esa entrevista a 2pac, en la que explicaba que él hacía música para mostrar lo que no se ve. A los medios no les interesaba mostrar la realidad que vivían en esos barrios.
Me gusta pensar que yo también cojo porciones para mis ilustraciones cuando la inspiración llega a través de redes sociales.
La verdad es que no busco aprobación en esas figuras. Hay un paralelismo con mi manera de entender la música. Yo me crié escuchando y haciendo rap, para producir un beat sobre el que rapear buscábamos inspiración en otros discos, robábamos trozos de canciones, hacíamos un loop y añadíamos un bombo y una caja y se hacía alquimia. Así nació el rap. Me di cuenta de esto viendo las colecciones de Virgil Abloh, en paz descanse. Él cogía cosas de la calle como carteles o señales o de museos, incluso intervenía sudaderas Champion. Virgil ha cogido porciones ropa y con eso ha hecho moda. Tengo una camiseta suya para Louis Vuitton que está por fuera todo lo que normalmente no se ve, las costuras, las etiquetas… Cuando lo vi, enseguida me vino a la cabeza esa entrevista a 2pac, en la que explicaba que él hacía música para mostrar lo que no se ve. A los medios no les interesaba mostrar la realidad que vivían en esos barrios.
Me gusta pensar que yo también cojo porciones para mis ilustraciones cuando la inspiración llega a través de redes sociales.
Que tu perfil de Instagram sea como un porfolio seguramente te permite llegar a mucha más gente. ¿Cuáles pueden ser algunos factores negativos? Estoy segura de que la exigencia respecto al tiempo que puedes dedicar a cada una de tus obras cambia.
Aciertas. Es una locura el ritmo al que tienes que actualizar para no desaparecer. Eso hace que inevitablemente dejes de lado técnicas que demandan más tiempo como el óleo, en ese sentido el digital te echa una mano para cumplir con las exigencias del algoritmo.
¿Cómo te enfrentas al lienzo en blanco los días que te sientes menos inspirado?
A través de redes recibo miles de estímulos que luego utilizo. Mi mente nunca descansa, es agotador y genera mucha ansiedad, pero lo bueno es que siempre tengo ideas en mente que plasmar. Trabajo muchas horas al día, debería cuidarme más.
Encima de una nube rosa, un ojo que derrama una lágrima púrpura. Así es el símbolo por el que se te conoce en Instagram. Me despierta la curiosidad… ¿Cuál es su significado?
Cuando llueve todos nos mojamos. Por mucho que nos creamos especiales si viene un virus todos podemos contagiarnos. Es cierto que si tienes que hacer cuarentena, estarás más cómodo en una casa grande, pero todos sentimos las mismas emociones. Las emociones nos ponen al mismo nivel.
Has trabajado con varias marcas como Nike, Swatch y Levi's. ¿Hasta qué punto permites que estas empresas limiten tu libertad creativa? ¿Te resulta complicado combinar la filosofía de cada marca con tus propios ideales?
Nunca haría nada que no considerase ético. Me resulta fácil adaptarme, suelo entender muy rápido lo que esperan de mí. Una marca cuando busca un artista quiere cualidades que nos vienen dadas por defecto, solo hay que evidenciarlas.
Además de ser artista, has escrito algunos libros recientemente, Hipster de Extrarradio, por ejemplo. Siempre habías dicho que “escribías dibujos”, ¿cómo te sientes al escribir palabras?
Me encanta, mi primera canción la escribí con 12 años. Siempre me ha gustado escribir, pero soy disléxico así que en la música encontré refugio. El libro que comentas recibió muchas críticas positivas sobre todo haciendo referencia a lo bien que estaba escrito. Después de toda una vida de humillaciones en la escuela a causa de mis faltas de ortografía, eso fue una tirita emocional.
¿Dé que hablas en tus libros? ¿Dirías que son una herramienta para decir lo que no puedes abarcar en tus pinturas?
De mi vida, todo basado en experiencias vitales. Se puede ser mucho más explícito, la pintura siempre está abierta a la interpretación del espectador.
Eres profesor en la plataforma Domestika, ¿en qué consiste tu curso de Retratos pictóricos con técnicas digitales? ¿Qué pueden esperar los alumnos de tus lecciones?
Toda mi experiencia y honestidad. Yo me di cuenta de que lo que podía ofrecer a los clientes, lo que me hacía distinto, era dar un acabado de óleo, que simplemente en secar tarda 5 días, en tiempo récord. Trabajaba mucho para publicidad y los tiempos eran muy cortos. Cuando entregaba una ilustración que parecía un óleo en 24 horas los clientes quedaban fascinados. Además, al trabajar con capas, podía hacer todos los cambios que el cliente pidiera fácilmente.
Para acabar, ¿qué podemos esperar de ti a corto plazo? Alguna musa que tengas en mente, alguna campaña en la que estés colaborando y te haga especial ilusión… Cuéntame.
Sí, muchos proyectos. A nivel personal seguir con mis series de Les Luces y Neocostumbrismo, me apetece pintar obras al óleo en gran formato y olvidarme del digital unos días por semana. Esto es lo que puedo contar, pero a nivel personal y profesional siempre tengo muchas ideas y proyectos, aunque poco tiempo.