La necesidad de explorar las desemejanzas entre el mundo sensible y el mundo inteligible viene dándose desde épocas antiguas. En su conocido mito de la caverna, Platón se pregunta cuáles son las fricciones entre estos dos mundos. En este relato se describe cómo unos prisioneros encadenados dentro de una caverna únicamente pueden observar las sombras proyectadas en la pared frente a ellos. Al no poder ver nada más, acaban asumiendo aquellas proyecciones en la pared como algo real. A través de este artefacto filosófico, Platón construye una alegoría sobre el conocimiento que sigue más viva que nunca.
Acudimos precisamente al retorno de este mito durante la clausura del D’A Film Festival, con An Urban Allegory (2024) el último trabajo corto de la consagrada directora italiana Alice Rohrwacher, que filma junto al artista francés JR. Ambos utilizan esta metáfora para cuestionar al público contemporáneo sobre cómo percibimos, construimos y reproducimos nuestra realidad constantemente atravesada por estímulos digitales. Y lo hacen a través de la mirada transparente de Jay, un niño de siete años, que, con ingenuidad, se atreve a cruzar los umbrales del mundo sensible para acercarse a una nueva suerte de verdad.
Este es el segundo cortometraje que la realizadora de Le meraviglie firma junto al artista callejero Jean René, conocido además de por sus murales urbanos por codirigir junto a la misma Agnès Varda el documental Visages villages. Su primera colaboración fue Omelia Contadina en 2020, donde reflexionaban sobre la desaparición de la agricultura campesina a través de un rito funerario. Fruto de esta simbiosis surge una pieza interdisciplinar basada en el proyecto Retour à la Caverne - Act I y Act II, un espectáculo ideado durante la restauración de la Ópera Garnier de París, en el que el artista francés imprimió la fotografía enorme de una cueva sobre la fachada del edificio, invitando a Damien Jalet a coreografiar a más de ciento cincuenta bailarines en un enorme andamio al ritmo de una música creada especialmente por Thomas Bangalter, uno de los integrantes del dúo musical Daft Punk.
La pieza, que cuenta con el cameo de Leox Carax, emerge como una fábula poética en la que un niño que acompaña a su madre a una audición para bailar en un espectáculo basado justamente en el mito de la caverna decide escaparse, liberándose tal vez cual esclavo de las sombras proyectadas en la pared, hasta toparse con un nuevo mundo que lo acabará atrapado. De la misma manera que sus imágenes nos siguen atrapando a nosotros en esa necesidad de hallar en la ficción una nueva especie de realidad.