Alex es alguien que sabe bien de lo que habla. Le apasiona lo que hace y se ha comprometido durante toda su vida a causas que le han tocado de cerca, en gran parte gracias a los valores que ha heredado de su familia. Actualmente hay tres temas que concentran su atención, especialmente el último: las políticas de género e identidad sexual, la revisión y construcción de la memoria histórica, y el impacto de los procesos migratorios. Y en ello ha dedicado gran parte de su trayectoria profesional. Ahora, con años de experiencia a sus espaldas y una colección de éxitos y fracasos que le han llevado a donde está hoy, propone para Bienalsur un encuentro que sitúe Cúcuta en el mapa y la convierta en un referente de diálogo abierto sobre las fronteras.
La entrevista es larga e intensa, pero a la vez es tan humana, tan directa y tan cruda, que reducirla sería aberrante y una falta de respeto hacia el proyecto y el compromiso de Alex, además de a mi propia ética periodística. Realizada siguiendo la metodología peripatética, es decir, mientras caminábamos, la conversación ha sido tan enriquecedora como ninguna otra que recuerde hasta el momento. Así que sin más preámbulos, te presento a una persona que está haciendo del mundo un lugar mejor. Y de verdad.